Llegamos a la Zona Cero en lo que fue el World Trade Center, estaba con mi hermana y mis padres; a pesar del tiempo transcurrido y ser niño, me impregné de voces llenas de nostalgia y tristeza compartida como si estuviera en los momentos del sufrimiento de miles de personas que corrían sin saber hacia dónde, pero esperando con ansiedad poder llegar a casa, con sus familias, porque la muerte los perseguía a cada segundo.
Mi papá nos había descrito semanas antes todo lo que ocurrió, casi como una historia que él mismo había vivido. Y el día de la visita, para nosotros fue de homenaje y plegaria por las víctimas. Por eso, arrodillados y abrazados en el mismo centro de todo, rezamos en silencio, lloramos en silencio.
Ninguna palabra puede llenar el vacío de las ausencias, ninguna palabra puede describir el dolor de tantos y de todos. Por eso, nuestro homenaje desde #MinutoDigitalPerú
Redactado por Patricio Escudero Conti, Lima, Perú