La vacancia de Castillo y el aparato represivo que se está instalando contra nuestras Libertades y la Democracia, es una tarea urgente, que se justifica en muchas razones que son perfectamente atendibles y entendibles. Por eso, ponemos a disposición de los lectores y amigos, un documento elaborado por @regularacional que dice lo siguiente:
“La vacancia de Castillo es necesaria y urgente. Se encuentra justificada en la puesta en riesgo de la seguridad de todos, la Democracia y la Economía; además de la afrenta de Castillo contra moral pública que significa la Constitución y los valores que ella encarna.
La integridad y seguridad se ponen en riesgo nombrando ministros vinculados al terrorismo, creando un cuerpo paramilitar de falsos ronderos y acercándonos al Movimiento Bolivariano.
La Democracia se pone en riesgo insistiendo con el cambio prepotente de la Constitución por mecanismos que actualmente no están contemplados en ella, amenazando instituciones democráticas, despachando fuera del Palacio y con la cercanía a Cerrón, y con la falta de respeto y tolerancia por grupos vulnerables como mujeres y homosexuales.
Finalmente, se pone en riesgo la Economía y libertad de expresión afectando la propiedad, nombrando personas inidóneas para el cargo y amenazando a los medios de prensa.
El mejor momento para realizar la vacancia es ahora, porque el de Castillo no es un gobierno real, sino una fuerza de ocupación que busca perpetuarse en el poder, con una estrategia pre-concebida.
El Congreso no tiene incentivos ni la estructura correcta para hacerle frente con una estrategia equivalente, inversa; por tanto, debe actuar de forma rápida y decidida ahora, sin pretender jugar una partida de ajedrez.
En el artículo 113 de la Constitución Política del Perú se dice que la presidencia vaca “por incapacidad moral permanente” del presidente. ¿Qué es incapacidad moral permanente?
La “incapacidad moral” de la Constitución peruana ha sido tomada del impeachment norteamericano. Incluso, si uno se remonta a casos ocurridos durante la vigencia de las primeras constituciones peruanas, se puede apreciar que no existen dudas sobre el uso de “incapacidad moral” entendida como una falta de ética que es tan grave que compromete la habilidad de una persona para gobernar un país.
Si uno revisa los diarios de debates del Congreso Constituyente, encargado de elaborar la Constitución actual, es fácil apreciar que existía consenso sobre el sentido de la frase “incapacidad moral”, siendo ésta una falta ética o delito grave. Luego, se puede apreciar, en el mismo debate, que la inclusión de la palabra “permanente” fue hecha con el único objetivo de reafirmar la gravedad que debía revestir el acto inmoral para poder justificar la vacancia.
Pero, ¿Qué significa “incapacidad moral”? Ser inmoral se puede definir como la imposibilidad de distinguir entre el bien y el mal o cuando –distinguiéndolo- se elige el mal. En el caso de Castillo, veremos que él elige el mal al poner en peligro nuestra seguridad, Democracia y Economía. Además, ha mentido al país abiertamente al desconocer –de manera tan rápida y frontal- los compromisos que juró respetar a través de la “Proclama Democrática”. Esto muestra su desdén por la Democracia y la Constitución, que suponen una suerte de “moral pública”, cuyo desconocimiento y abierta afrenta también supone incapacidad moral”
A continuación el documento completo: