Implosión es cuando algo se rompe hacia adentro por presión que se ejerce de fuera. Explosión es cuando se rompe algo por presión que se ejerce desde dentro. Desmadre total y absoluto es cuando pasan ambas cosas a la vez. Eso es lo que vemos en los Estados Unidos de América, el imperio, como le decían los comunistas antes de que entraran los socialistas/comunistas Gucci a gobernar ese país. Pero como Dios es grande, parece que los estadounidenses están despertando para evitar que se rompa.
La presión que ejerce el Nuevo Orden Mundial en Estados Unidos está tratando de socavar sus fundamentos desde los cimientos. Quieren cambiar hasta el uso de las palabras padre y madre, por considerarlas discriminatorias. Hoy en día, todo es discriminación. Por disentir de cualquier concepto se es tachado de racista.
Entre la teoría del racismo crítico (Critical Race Theory), al uso de género y no sexo para definir identidad anulando la biológica, al aborto cómo medio de control de la natalidad, han tratado de destruir el tejido social de el que fuera bastión de la libertad individual, del pensamiento crítico, de la familia como núcleo social.
En las recientes elecciones del 2021 hemos visto un claro revés a todo esto. De pronto, los estadounidenses se están despertando. Defendieron a su policía y el financiamiento para ésta, incluyendo donde murió George Floyd, en Minneapolis. Defendieron el derecho de los padres a cuidar que se les enseña a sus hijos en la escuela, y a protegerlos de las ideas que disemina la ideología de género que han producido ya varias violaciones sexuales y sodomización a niñas menores en el baño de mujeres por estudiantes hombres que dicen sentirse mujer.
Además de los temas de índole social, las políticas socialistas globalistas están también afectando no sólo a los Estados Unidos sino al mundo entero en materia económica.
Las decisiones tomadas por la Administración Biden-Harris con respecto a la migración ilegal hacia Estados Unidos en vez de disminuirla la han aumentado. Parecieran no entender que mientras más aniquilan la productividad y la inversión en América Latina imponiendo políticas socialistas, más aumenta el flujo migratorio. La realidad es que quieren aniquilar la inversión para que gente como George Soros se pueda adueñar de las inversiones en minería etc una vez llevadas a la quiebra.
La migración ilegal también es una herramienta importante para los Demócratas. Están llevando a los migrantes a Estados bajo dominio Republicano con el objetivo de cambiar el tejido político de la sociedad local. Creen que los migrantes y las minorías votarán siempre Demócrata.
La Administración Biden-Harris también ha afectado adversamente a la industria del petróleo. Con la excusa de generar energía limpia, han llevado los precios de la gasolina al techo sin importarles el inevitable incremento al costo de vida dentro y fuera de los Estados Unidos. No quieren que la gente use sus vehículos y según ellos, esto obligará a que se usen más los vehículos eléctricos. El aumento en el costo de alimentos les tiene sin cuidado, aparentemente.
También parecen no entender que si los costos de producción aumentan, las empresas inevitablemente terminan recortando personal, lo cual genera más desempleo.
Al final, pagan los gringos, pero también pagamos todos los demás. Lo increíble es que aún haya gente que defienda a quienes están causando la mayor crisis inflacionaria desde los últimos 13 años. Esto redundará en una recesión de proporciones alarmantes. Es hora que los países vean hacia adentro y no más hacia afuera. Es decir, consumamos lo que producimos, y dejemos de ver a los gringos como la panacea que resuelva todos nuestros problemas.
Fotografía referencial: NOM, en redes sociales