Las denuncias hechas el pasado domingo en el diario El Comercio y los programas dominicales Cuarto Poder y Panorama no son sino unas más de las tantas que ponen en cuestión el carácter del actual gobierno y la incapacidad moral del comunista Castillo.
¿Ahora qué dirán aquellos que “ingenuamente” (léase complicidad) llamaban a apoyar la “gobernabilidad”? ¿Ya se pronunciaron Caipo, Márquez, Acuña, entre otros?
El detritus brota por donde uno ni se imagina. ¿Qué dirán los curas rojos Castillo y Barreto? ¿Seguirán apoyando a Castillo?
La antiminera comunista Vasquez dice que “todo se aclarará” y Bellido y Cerrón, los compañeros de ruta de Castillo, le piden aclarar lo que a vista de todos se sabe. Incapacidad y corrupción.
¿Qué esperan algunos columnistas para tomar distancia en vez de pedir que “dejemos todo en manos de la Fiscalía y Poder Judicial”? Hay que ser ingenuos. O acaso la Fiscalía no avanza en la denuncias y pruebas mostradas por el llamado camarada Sasha, con las que se demostraría la ligazón entre el narcoterrorismo y los principales cabecillas de la llamada “organización criminal” (según un Fiscal) Peru Libre, relación que podría extenderse al comunista Castillo.
¿Qué espera el Congresista (Héroe de la Democracia) José Williams -presidente de la Comisión de Defensa- en hacer públicos los chats entre el ex Comandante General del Ejército Vizcarra y el comunista Castillo? ¿Con ello se pondría en claro qué pasó con las “gestiones” en favor de “los coroneles chotanos”?
Así mismo, ¿Para qué despacha clandestinamente el Ministro de Defensa? El Congreso de la República debería suspender “la semana de representación” y declararse en sesión permanente, llamando a este ministro y a la Primer Ministro Vásquez para que se presenten en el acto.
Sin embargo ya no todo pasa por la corrupción e incapacidad sino que el comunista Castillo estaría poniendo en peligro la seguridad del Perú y su integridad territorial. O qué busca el boliviano Evo Morales sino desintegrar el sur peruano y poner sus riquezas al servicio del castrochavismo.
Aquí ya no estamos hablando sino de Traición a la Patria.
¿Qué esperan las Instituciones, garantes de la seguridad e integridad patria?
El Congreso no solo debe votar la vacancia por incapacidad moral sino, repito, por TRAICIÓN A LA PATRIA.