Mientras los políticos y la gente de poder sigan olvidando que se van a morir un día quieran o no, y van a tener que responder por sus actos, seguirán abusando de ese poder. todos somos responsables de nuestras acciones. Por eso, creo que más de uno estará de acuerdo conmigo:
- Presidente Alejandro Giammattei denuncie el Pacto de San José y nos saque de la CIDH. La lista de beneficios para Guatemala es larga. Esto, únicamente daña a la izquierda, a Helen Mack y sus secuaces.
- La Corte de Constitucionalidad haga lo que deba hacer para que se aplique la pena de muerte.
- Es imperante que los mecanismos legales se activen para impedir un inminente fraude electoral en el 2023. Impedir el uso de programas o sistemas que se ha demostrado son controlados por la izquierda a la cual favorecen, siempre.
- El salario mínimo aprobado, como los economistas serios lo dicen con base en los hechos, produce desempleo y jamás ayuda al trabajador. Al igual que los controles de precios y todas las medidas que manipulan el mercado, son obtusas y contraproducentes. Sólo un mercado libre hace que bajen precios y suban salarios.
- Que surja un candidato al que no le corten las alas, que tenga visión de país, la valentía para poner a Guatemala por encima de todo, y medios para darse a conocer. Especialmente porque gracias a la Corte de Constitucionalidad, los únicos partidos con financiamiento son el oficial y los de dinero de dudoso origen.
- El Ministerio de Educación haga algo para que la Constitución sea respetada por colegios e instituciones educativas de todo nivel que la violan a diario diseminando ideas contrarias a la Constitución.
- Espero que la Cámara de Representantes conduzca las audiencias que se supone que vienen y destape la podredumbre de USAID. Urge que se sepa lo de Odebrecht, entre otras cosas.
Será un año complicado, sin lugar a dudas.
Ruego a Dios de sabiduría a quienes toman las decisiones para que piensen a largo plazo, piensen en el país, piensen en sus hijos y sus empresas, con visión a largo plazo. Para que su ambición no sobrepase su lógica y algún sentido de ética que puedan tener, para no acabar el país.
Mientras los políticos y la gente de poder sigan olvidando que se van a morir un día quieran o no, y van a tener que responder por sus actos, seguirán abusando de ese poder. todos somos responsables de nuestras acciones. La responsabilidad es individual y los burócratas son responsables legalmente por los próximos 20 años de todas sus porquerías o sus aciertos.
Quienes no estamos en el ruedo político para ocupar un cargo, seguiremos vigilantes denunciando lo que haya que denunciar, aplaudiendo lo bueno, pero sobre todo, como dice la Fundación Contra el Terrorismo “no perdonamos y no olvidamos”.