El Papa Francisco habló sobre las dos apariciones de Jesús resucitado a los discípulos y a Tomás, quien pide una prueba de la resurrección, y el Señor le ofrece que meta sus dedos en sus llagas que valieron nuestra redención. En la primera aparición de Jesús a sus discípulos no se encontraba Tomás, pero sí en la segunda, cuando el llamado Mellizo estaba con la comunidad.
Dice el Papa que las palabras de Jesús para Santo Tomás eran como decirle: “Si quieres encontrarme no busques lejos, quédate en la comunidad, con los otros; no te vayas, reza con ellos, parte con ellos el pan”.
Las llagas de Cristo son pruebas de su amor a los hombres, son los canales de su misericordia.
“Queridos hermanos y hermanas, la invitación hecha a Tomás es válida también para nosotros. Nosotros, ¿dónde buscamos al Resucitado? ¿En algún evento especial, en alguna manifestación religiosa espectacular o sorprendente, únicamente en nuestras emociones o sensaciones?”
¿O en la comunidad, en la Iglesia, aceptando el desafío de quedarnos, aunque no sea perfecta?, pregunta Francisco.
“Nuestra Madre Iglesia es el Cuerpo de Cristo; y está ahí, en el Cuerpo de Cristo, que se encuentran impresas, todavía y para siempre, las señales más grandes de su amor”.
En la comunidad, podemos encontrar a Jesús, es ahí, dijo el Papa, que Jesús nos muestra, “impresas en su cuerpo, las señales de las llagas: las señales del Amor que vence el odio, del Perdón que desarma la venganza, de la Vida que derrota la muerte”.
En su alocución, el Santo Padre, afirma que, como Tomás, también cada uno de nosotros, siente la dificultad en creer.
“De hecho, no siempre es fácil creer, especialmente cuando, como en su caso, se ha sufrido una gran decepción. Tomás ha seguido a Jesús durante años, corriendo riesgos y soportando penalidades, pero el Maestro fue crucificado como un delincuente y nadie lo ha liberado, ¡nadie ha hecho nada! Ha muerto y todos tienen miedo. ¿Cómo fiarse todavía?”
Cuando Tomás se aleja, Jesús se aparece por primera vez a los discípulos la noche de Pascua, y puede recuperar esa ocasión volviendo con los otros, volviendo allí, afirmó Francisco, en esa familia que ha dejado asustada y triste. Cuando lo hace, cuando vuelve, le dicen que Jesús ha venido, pero a él le cuesta creer; quisiera ver sus llagas. Y Jesús le complace.
Con información de Vatican News https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2023-04/regina-coeli-papa-francisco-domingo-misericordia-tomas-incredulo.html