Pasan los días, la semanas, los meses y la injusticia prevalece cuando tienes color diferente, cuando eres caviar, cuando las izquierdas del dinero mal habido se unen para defender a una corrupta, sinvergüenza y delincuente como Susana Villarán, la niña “prodigio del delito” de Odebrecht y los ladrones de las empresas del Foro de Sao Paulo.
Ella está procesada en libertad y el que sustrajo un cuarto de arroz o un kilo de harina para darle de comer a sus hijos, purga diez y tal vez quince años de cárcel. Pero la ladrona, la miserable, está en la playa descansando y bronceándose mientras el cholo, el negro, el clase media, subsiste en medio del hacinamiento de las prisiones más peligrosas de esta parte de América.
Es que “Villarán”, prima de los multimillonarios, emparentada con los subversivos que asesinaron y mataron soldados y policías, es de izquierda pituca y “merece consideraciones” especiales.
Recuerden:
“Susana Villarán admitió que recibió aportes de Odebrecht y OAS para financiar la campaña contra su revocatoria en el año 2013. Ante la petición de la Fiscalía peruana de imponerle 36 meses de detención preventiva, la ex alcaldesa reconoció los hechos en los que estaría involucrada por la recepción de 10 millones de dólares”… y parte de ese dinero ¿Adonde fue? ¿A un restaurante en New York? ¿A su joven amante, mencionado en corrillos y conversaciones no tan reservadas?
“Según lo declarado por Villarán, siempre tuvo conocimiento de las contribuciones de esas firmas a la campaña del “No a la revocatoria” y que la decisión de admitirlas la tomó con José Miguel Castro, su ex gerente municipal”. A más aceptación de la realidad, sobran pruebas y para eso está la condena penal que ella, extrañamente, no cumple en prisión.
Susana Villarán de la Puente fue electa Alcaldesa de la Municipalidad Metropolitana de Lima, para el periodo 2011 al 2014, habiendo postulado a dichas elecciones municipales a través del denominado Partido Descentralista Fuerza Social, una máscara de los grupos extremos del comunismo peruano que se “blanquearon” con un nuevo nombre comercial y electoral, para engañar a la población.
El Ministerio Público dice lo siguiente:
“La imputación contra Susana Villarán de la Puente, por la comisión del delito de Lavado de Activos reposa en haber dirigido el dinero producto del acto de corrupción y (además proveniente de la caja 2 de Odebrecht y OAS) al pago de servicios de marketing para sus campañas políticas por No Revocatoria y Reelección a la Municipalidad Metropolitana de Lima. 3. La forma de pago, se realizó mediante entregas en efectivo y habiendo declarado hechos falsos ante el Jurado Nacional de Elecciones y a la ONPE (en cada caso), da muestra del propósito de evitar la identificación del origen ilícito de los fondos recibidos (División de operaciones estructuradas y Contraloría), los cuales eran producto de una actividad delictiva previa (corrupción de funcionarios)”
A esto se suman más delitos y más implicados …pero ni uno purga prisión. ¿Por qué?
Y se acabó el COVID, ahora todos los ladrones y ladronas a la cárcel.
Para mayor información lean el requerimiento Fiscal:
https://www.gacetajuridica.com.pe/boletin-nvnet/ar-web/409821192-Requerimiento-prision-SV.pdf