La economía de las familias peruanas va de mal en peor, eso no se puede esconder ni tapar; es inaudito que desde el gobierno no se tomen decisiones correctas, decisiones necesarias, a más de seis meses de administración en zigzag, por momentos en plan “no te muevas” (una especie de pega-inmóvil), cuyos efectos son terribles para las familias más jóvenes y para los peruanos de la tercera edad en especial.
La pobreza es un paisaje natural en el Perú, ahora con más extensión. La pobreza es lo único inclusivo en nuestra nación, y lo peor de este gravísimo estado de cosas, es que la situación de los más pobres es un tema sobre el cual todos -gobierno, congreso, medios y partidos políticos- se lavan las manos y cómo no, voltean la mirada, con una increíble y patética indiferencia que lo único que trae es semillas para la violencia extrema a pasos lentos, pasos que se vuelven más acelerados en un camino extremadamente peligroso.
En el último “Encuentro Nacional: Economía de la Libertad, en un país que pierde espacios de Libertad”, realizado por el Instituto del Ahorro y la Fundación Minuto Digital, se analizaron algunos indicadores e informaciones que el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) hizo el 22 de junio, hace muy pocos días. Veamos:
- En abril, el sector agropecuario decreció 14,2 por ciento, por la menor producción de productos andinos (papa, cebada, arveja, haba, y forrajes). En los cuatro primeros meses de 2023, el sector se redujo 4,6 por ciento.
- La actividad pesquera de abril se contrajo 2,6 por ciento, debido principalmente a la menor captura para consumo industrial. El sector aumentó 17,6 por ciento en los primeros cuatro meses del año.
- En abril, la producción de hidrocarburos se redujo 0,3 por ciento interanual, por la menor extracción de líquidos de gas natural. Entre enero y abril de este año, el sector registró una caída de 0,9 por ciento.
- La manufactura no primaria disminuyó 8,3 por ciento en abril con relación al mismo mes de 2022, por la caída en la producción de bienes de consumo masivo, insumos y aquellos orientados al mercado externo. El sector decreció 7,1 por ciento en el periodo enero-abril de 2023.
- La actividad de construcción de abril bajó 5,1 por ciento interanual, debido a los menores proyectos privados y de autoconstrucción. De enero a abril de este año, el sector acumuló una caída de 9,8 por ciento.
- En el cuarto mes de 2023, el sector servicios se contrajo 0,3 por ciento interanual, con las contribuciones negativas de los sub-sectores telecomunicaciones y financiero y seguros. En los cuatro primeros meses del año, el sector acumuló una disminución de 0,6 por ciento.
- En abril, la producción de cobre creció 31,4 por ciento interanual por la entrada en operación de Quellaveco y por un efecto base. La producción de Southern y Las Bambas creció 79,0 y 58,9 por ciento, respectivamente; puesto que ambas paralizaron operaciones por problemas con las comunidades en el año previo. Asimismo, se incrementó la producción de la mediana y pequeña minería (resto) en 28,6 por ciento, principalmente por la mayor producción de cobre de Shougang.
- En términos interanuales, la producción de bienes de consumo masivo se redujo 5,1 por ciento. La reducción en estos bienes se debe principalmente a la disminución en las ramas de:
a) Prendas de vestir, por menor demanda externa de prendas como poleras (-15,9 por ciento), chalecos (-57,1 por ciento), y polos (-33,8 por ciento).
b) Aceites y grasas, por menor producción de aceite vegetal (-21,9 por ciento), mantecas diversas (-8,4 por ciento), y margarina (-35,3 por ciento).
c) Cerveza y malta, por menor producción para reducir inventarios.
d) Otros artículos de papel y cartón, por menor demanda interna de bienes como papel higiénico (-51,2 por ciento), y papel toalla (-25,6 por ciento).
e) Productos de tocador y limpieza, por menores ventas de artículos como detergente (-3,7 por ciento) y desengrasantes (-10,7 por ciento).
f) Productos alimenticios diversos, por menor demanda de productos como café tostado y molido (-46,7 por ciento), sillao (-49,7 por ciento), postres instantáneos (-29,9 por ciento), y mejoradores para masas (-57,4 por ciento).
g) Bebidas alcohólicas, por menor demanda interna de productos como pisco (-12,4 por ciento) y vino (-19, 3 por ciento). - La reducción en la producción de bienes orientados al mercado externo (18,9 por ciento) fue el resultado de la menor demanda externa por de prendas de vestir, en especial de parte del mercado de Estados Unidos. Esto ha implicado una menor demanda local por hilados y tejidos para fabricar las prendas de exportación. También contribuye la menor demanda externa por hilados y tejidos, como los hilos de algodón (-16,0 por ciento), la tela de algodón (-18,3 por ciento), y la tela dril (-6,5 por ciento); y conservas de alimentos, como alcachofas (-24,7 por ciento), y espárragos congelados (-33,9 por ciento) y en conserva (-21,9 por ciento).
Los sectores afectados representan un significatico porcentaje del mercado laboral: trabajadores que no tienen horizonte sostenible en el tiempo (sin ahorros personales, sin mejora en sus habilidades).
puestos de trabajo formal a abril 2023
Ustedes podrán ver que si bien se “crean empleos”, éstos son insuficientes y de remuneraciones y condiciones que no constituyen una probable garantía de meritoria estabilidad.
El país, revisando estos indicadores y el cuadro del empleo en el sector privado, va muy mal. Una de las demostraciones más palpantes de este daño directo a los peruanos, es el hambre, la desnutrición, la falta de alimentación.
Hoy día, de cada 10 familias pobres, solamente tres se alimentan con desayuno, almuerzo y cena, de acuerdo a sus condiciones. Cuatro familias solamente almuerzan y es posible que consigan pan, arroz o fideos para cenar algunos días (no todos los días). Y tres familias, sólo almuerzan, gracias a comedores de la Iglesia Católica (Cáritas) y otras organizaciones de ayuda humanitaria. Los comedores populares no se dan abasto y los almuerzos que estamos señalando en esta descripción, van a un promedio de dos de cada diez familias únicamente, porque no se dan abasto.
El drama va más allá, porque aproximadamente el 50% de los niños a nivel nacional están en la línea de desnutrición y anemia. Ese es el país en el que el gobierno no hace nada, por incompetencia. Ese es el país en el cual el Congreso mira de costado. Ese es el país con una prensa buscando contratos y fondos para proveer su planilla. Ese es el país sin partidos políticos que estén exigiendo acciones, proponiendo soluciones.
Las promesas no nutren, las leyes no alimentan, los medios son la nueva pandemia.