El diario alemán Bild, trae la preocupante noticia que estudiantes de ese país son presionados a convertirse al Islam por miedo.
En declaraciones al diario, un funcionario de seguridad afirma que la situación en las escuelas es dramática: “Cada vez más padres de niños alemanes acuden a centros de asesoramiento porque los niños cristianos se ven obligados a convertirse al Islam para no ser excluidos de la escuela”
Ocurre que “debido a la fuerte inmigración de los últimos ocho años, la proporción de jóvenes y niños musulmanes en las escuelas ha aumentado significativamente. Además, muchos de los niños provienen de familias estrictamente religiosas. Los inmigrantes de Siria, Afganistán e Irak en particular provienen de culturas muy arcaicas”, expresa el funcionario.
Son bastantes los inmigrantes de países islámicos para quienes el Corán es lo central en sus vidas.
Según una encuesta del Instituto de Investigaciones Criminológicas de Baja Sajonia (KFN), la mayoría de los estudiantes musulmanes (67,8 por ciento) dice: “Para mí, las reglas del Corán son más importantes que las leyes en Alemania”. Ellos consideran que la Teocracia Islámica es la mejor forma de gobierno, y aunque la encuesta no es representativa, los expertos y políticos siguen estando muy preocupados.
“Cuando las niñas [de familias musulmanes] en la escuela se comportan demasiado occidentalizadas a los ojos de los jóvenes musulmanes, no usan velo ni conocen a los niños, los estudiantes varones piensan que tienen que defender su honor y advierten a las niñas que se comporten como musulmanes devotos”. Sobre propios y ajenos se ejerce la presión para adoptar la cultura islámica.
Los profesores alemanes se sienten abrumados, reporta Bild. “Los estudiantes musulmanes varones suelen parecer muy amenazadores y a veces violentos. En los patios de las escuelas están surgiendo verdaderas sociedades paralelas. Y si muchos niños refugiados vuelven a la escuela en verano, la situación será aún más explosiva”, afirma el funcionario estatal.
Es claro que la situación puede tornarse más dramática en escuelas en ciudades donde la proporción de estudiantes musulmanes supera el 80 por ciento, como Berlín, Frankfurt, Offenbach, Duisburg, Essen.
También vía redes sociales
Las redes sociales también son usadas por ciertos influencers islámicos para promover el rechazo al estilo occidental: “Hay ciertos canales de TikTok en los que estrellas del pop islamistas convencen a los estudiantes de que deben oponerse al modo de vida occidental y que sólo un califato es la forma correcta de gobierno”. “Se les dice que los estudiantes musulmanes son especiales, mientras que los estudiantes cristianos y, por tanto, incrédulos, no valen nada”, afirma el funcionario público, en referencia a los canales de odio en las redes sociales.
