En los últimos años, la transformación digital fue la hoja de ruta para modernizar empresas. Hoy, ese enfoque ya no basta: el nuevo escenario exige una reinvención, con la inteligencia artificial (IA) como eje estratégico. Así nace el concepto de Empresa Aumentada, que no solo digitaliza procesos, sino que define casos de uso con IA capaces de generar valor real y medible para el negocio.
“La transformación digital, entendida como digitalización de procesos existentes, ya no es suficiente. Las organizaciones que realmente marcan la diferencia están adoptando un enfoque empresarial basado en IA, rediseñando su modelo de negocio, creando nuevas fuentes de ingresos y alineando sus decisiones con resultados concretos”, Rodrigo Stefanini, CEO Latam de Stefanini Group.
Más allá de adoptar tecnologías por moda, Stefanini destaca que el verdadero diferencial está en identificar áreas críticas del negocio donde la IA puede generar impacto, como aumento de productividad, personalización de servicios o reducción de pérdidas. El foco ya no está en “usar IA”, sino en generar valor mediante IA. Según Stefanini, las empresas que priorizan una estrategia “IA-First” ganan terreno más rápido, aprovechan mejor sus datos y desarrollan soluciones personalizadas con alto impacto. Para lograrlo, recomiendan seguir estos cinco pasos clave:
- Ponga la IA en el centro de su estrategia, no al margen: No se trata de sumar herramientas aisladas de IA, sino de pensar productos, servicios y modelos operativos con IA desde su concepción como componente estructural.
- Evalúe la calidad de sus datos internos: Los modelos de IA aprenden de los datos. Si están desordenados o incompletos, la implementación será limitada. La inversión en limpieza e integración de datos es fundamental.
- Integre, no sobrecargue: La IA debe integrarse de forma fluida a los sistemas existentes, con una infraestructura capaz de escalar sin generar cuellos de botella.
- Defina objetivos claros y medibles: Antes de iniciar, es clave tener KPIs que alineen expectativas entre las áreas internas y los proveedores tecnológicos. Lo que no se mide, no se puede mejorar.
- Cuente con el sponsorship de los líderes y prepare a su equipo para el cambio: La adopción de IA requiere liderazgo visible y comprometido, así como gestión del cambio cultural. Capacite, comunique y vincule a los colaboradores desde el inicio para construir una cultura digital e innovadora.
“Hoy, ya no se trata solo de automatizar tareas, sino de crear nuevas formas de generar valor, con sistemas inteligentes que se adaptan y aprenden constantemente. Es natural que, en el camino de adopción de la IA, surjan desafíos y aprendizajes y lo importante no es evitar por completo los errores, sino saber gestionarlos de forma controlada y con propósito. La clave está en no castigar esos fallos, sino en aprender de ellos para acercarnos más a los objetivos estratégicos. La IA no reemplaza al talento humano, lo potencia”, destaca Stefanini.
Ejemplos concretos de esta transformación se observan en sectores como salud, moda o finanzas. Empresas como PathAI están revolucionando el diagnóstico médico con IA, mientras que firmas como Stitch Fix o Mastercard ya usan estas tecnologías para predecir comportamientos, personalizar experiencias y prevenir fraudes en tiempo real.
Finalmente, el especialista sostiene que el salto de la transformación digital a la transformación empresarial basada en IA marca un cambio de época. Las organizaciones que den este paso no solo serán más ágiles, sino también más resilientes frente a los cambios del mercado.
“Adoptar un modelo IA-First no es una moda, es una necesidad estratégica para quienes quieren liderar en los próximos años”, concluye Stefanini.
Con información vía Sheyla F. Guerrero Herrera – PR| Gestión de Medios