¿Cómo así le habla usted a los jóvenes de pensiones, de jubilación, vejez, longevidad, si eso es algo tan lejano, invisible para ellos?
Esa es la pregunta que me hacen en un programa de radio, y lo sentí como si estuviera perdiendo el tiempo o más bien, los jóvenes lo perdieran conmigo, pero no, no callé y respondí:
“Siempre comienzo diciendo que me perdonen por aceptar la invitación, porque es un tema a todas luces aburrido, enredado y que se mira a los 65 años de edad, no ahora en la juventud ¿Es así? pregunto mirando a una jovencita parecida a mi hija y ella asiente. Pues bien -sigo- denme por favor dos minutos y luego se van, lo prometo, porque yo también me iré, sientanse alegres por eso. Un par de risas, caras dubitativas y les cuento lo que pasó con Rodrigo y Marisa, de 21 y 18 años, padres de Yeison, con apenas 3 meses.
Rodrigo trabajaba en un supermercado en el área de cortes de carnes, estudiaba de noche en la universidad, ingeniería ambiental. Marisa, su pareja, estudiaba lo mismo y se enamoraron y tuvieron a Yeison. Viven en la humilde casa de Rodrigo y ella, Marisa, cuida del bebé hasta poder dejarlo con su suegra para conseguir un trabajo que le permita volver a estudiar. Doña Alicia, la suegra, es una de las poquísimas pensionistas del sistema de reparto que recibe apenas S/. 215 soles mensuales y lava ropa para completar las prioridades del hogar donde vive con sus 3 hijos menores, enviudó hace ocho años. Rodrigo en su trabajo recibe el salario mínimo y con ello, el seguro social de salud, y paga AFP para la jubilación. Lleva siete meses trabajando duramente y su salario ahora se estira entre su mamá, sus hermanos, su pareja y el bebé.
Hasta ese momento, entre mis oyentes muchos comienzan a sentirse Rodrigo y algunas se ven como Marisa o la sienten como alguien que conocen.
Queda un minuto: Rodrigo sale apresurado de su trabajo y es atropellado por un ómnibus, fallece. ¿Qué sucede con Marisa y el bebé? ¿Saben ustedes que por pagar AFP su pareja tiene derecho a una pensión de viudez, su bebé a pensión de orfandad, su mamá a pensión de ascendencia y además a los gastos de sepelio? ¿Saben cuanto dinero es y por cuánto tiempo?
Bueno amigos, eso es todo, me voy, se cumplieron los dos minutos. Disculpen la pérdida de tiempo y el aburrimiento.
Es en ese instante que todos -sin ninguna excepción- piden que me quede, que se les explique, quieren conocer, saber, aprender y estar siempre informados. Tan simple como lo cuento, tan necesario como es.
La educación previsional es sencilla, no tenemos que complicarla, se trata de hablar el lenguaje de todos, la oportunidad es de todos.
