- ¿Qué necesitamos para recuperar la competitividad y elevar los niveles de crecimiento y desarrollo del país?, fue el tema abordado durante el desayuno de trabajo organizado por la CONFIEP.
- Perú viene perdiendo competitividad: cayó 10 posiciones en solo un año, ubicándose en el puesto 68, por debajo de los demás países del Alianza del Pacífico, según el Doing Business del Banco Mundial, comentó Raúl Andrade, Director de Proyectos de Economía Aplicada de Apoyo Consultoría.
- Presidente del BCR, Julio Velarde, opinó que para ganar competitividad, debería reducirse el Impuesto a la Renta de las empresas, como lo vienen haciendo otros países del mundo.
- Por su parte, Armando Lara, experto de la OCDE, señaló que la presunción de dolo en la norma antielusiva es muy negativa.
La excesiva regulación –entre ellas la tributaria- que tenemos en el país, no solo aumenta la alta informalidad, sino que, en comparación con otros países, instituye un marco regulatorio y tributario poco propicio y atractivo para la actividad empresarial.
Durante el foro organizado por la CONFIEP “¿Qué necesitamos para recuperar la competitividad y elevar los niveles de crecimiento y desarrollo del país?”, el Presidente del Banco Central de Reserva del Perú, Julio Velarde; Armando Lara, consultor externo de la ONU, Banco Mundial y BID; y el Director de Proyectos de Economía Aplicada de Apoyo Consultoría, Raúl Andrade, discutieron sobre las razones por las que el país viene perdiendo competitividad.
En su intervención, Julio Velarde aseguró que “no hay país que haya crecido sin escuchar a las empresas privadas. Las normas se hacen sin analizar cómo podrían afectar a la actividad privada o algún mercado”.
Asimismo, señaló que la tasa del Impuesto a la Renta que pagan las empresas en el Perú debería reducirse, como viene sucediendo en algunos países como Estados Unidos, en el que las compañías tienen una menor tasa para que puedan reinvertir e impulsar su crecimiento. Agregó que con las recientes disposiciones emitidas por el Gobierno para permitir mayores deducciones del Impuesto a la Renta que pagan las personas, se hará más compleja la declaración tributaria, tal como ocurre actualmente en Estados Unidos, en que se debe contratar a un contador para ese efecto en la mayoría de casos.
Por su parte, Armando Lara aseguró que si bien existe una tendencia en el mundo de establecer medidas antielusivas para promover el incremento en la recaudación, la norma antielusiva peruana debe corregirse.
Así, recomendó revisar las disposiciones de la norma que establecen responsabilidad para los directores en la planificación fiscal, que puede derivar, incluso, en responsabilidad penal, presumiéndose el dolo y transfiriendo a los ejecutivos la responsabilidad de probar su inocencia. Advirtió que los países que han aprobado normas similares, han establecido responsabilidades solo civiles y administrativas y para la justicia son inocentes hasta que no se les pruebe su culpabilidad. “En el Perú se le ha dado una bazuca a la autoridad fiscal, que podría afectar negativamente a las empresas y empresarios”, agregó.
Por su parte, Raúl Andrade, Director de Proyectos de Economía Aplicada de Apoyo Consultoría, advirtió que el Perú viene perdiendo competitividad. El último reporte del Doing Business del Banco Mundial, señala que Perú cayó 10 posiciones en solo un año, ubicándose en el puesto 68, por debajo de sus socios en la Alianza del Pacífico. Asimismo, ha caído en el ranking de Competitividad Global del Foro Económico Mundial, en el que se ubica en el puesto 63 de 140 económicas, muy por debajo de Chile, México y Colombia, sus socios en el bloque comercial.