En el cuarto trimestre de 2020, el PBI disminuyó 1,7 por ciento respecto al mismo periodo de 2019, contracción menor a la del trimestre anterior debido, principalmente, al avance del plan de reanudación de actividades y al impulso de proyectos de inversión. Sin embargo, la cuarentena iniciada el 2021 va en ritmo contrario a la recuperación impulsada por inversionistas privados fundamentalmente, haciendo retroceder expectativas y generando una gran desconfianza, sin precedentes, en el manejo de la economía nacional.
La actividad económica se redujo 11,1 por ciento en 2020 (sobre todo en el segundo trimestre con -30 por ciento), la mayor tasa de contracción anual registrada desde 1989, lo que produjo millones de puestos de trabajo perdidos, millones de despidos, millones de quiebras y cierres de micro y pequeñas empresas. Frente a eso, las señales del gobierno son desconcertantes.
En términos desestacionalizados, la demanda interna en el cuarto trimestre de 2020 mostró una recuperación respecto al trimestre previo, alcanzando un nivel similar al registrado antes de la pandemia (cuarto trimestre de 2019). Con ello, el PBI en el cuarto trimestre del 2020 también mejoró respecto al trimestre anterior.
La demanda interna del cuarto trimestre de 2020 se mantuvo inalterada con respecto al mismo periodo de 2019, luego de tres trimestres de caídas consecutivas, explicado por la continua recuperación del gasto de los hogares y al crecimiento de la inversión.
- En el cuarto trimestre de 2020 el consumo privado cayó 1,5 por ciento interanual, explicado por un mercado laboral aún muy debilitado por el cumplimiento de protocolos sanitarios que ralentizan la dinámica de las ventas, y por los bajos niveles de confianza del consumidor respecto a los observados antes de la crisis.
- La inversión privada aumentó 9,4 por ciento en el cuarto trimestre de 2020, luego de tres trimestres de caídas consecutivas. Este resultado se asoció al dinamismo de la autoconstrucción y a la recuperación en las expectativas de los inversionistas sobre la actividad local y global, favorecidos por las noticias acerca del desarrollo de una vacuna contra el COVID-19.
- El consumo público aumentó en 21,7 por ciento en el cuarto trimestre de 2020, debido a la adquisición de suministros médicos y a la mayor contratación de profesionales en el actual contexto de pandemia, así como por actividades de intervención inmediata en el marco del programa Trabaja Perú y por gastos en servicios de mantenimiento vial vecinal en el marco del programa Arranca Perú.
- En el cuarto trimestre de 2020, la inversión pública creció 8,6 por ciento, a diferencia de la caída del trimestre anterior (-24,7 por ciento), debido a la ejecución de proyectos y actividades ligadas a la reconstrucción del norte, al programa Arranca Perú y al reinicio de operaciones de otros proyectos de interés nacional.
¿Las señales de confianza, se están borrando nuevamente?