Los peruanos somos expertos en todo, donde sea, cuando sea. Sabemos más de pobreza, inflación y supervivencia financiera que cualquier Premio Nóbel, conocemos más de desastres y terremotos que los centros de análisis y seguimiento en el mundo, somos capaces de transformar lo que otros botan, en comidas que dan envidia al paladar más exquisito, hacemos de la ilusión propia una herramienta de crecimiento individual que si tuviera sentido colectivo -ese ánimo y coraje-, impulsaría un liderazgo incalculable. Si nos vamos del país, nadie nos supera en tenacidad y constancia, en el respeto a las leyes y en la contribución con la sociedad que nos acoge… pero aquí, somos lo más extraño que alguien pueda imaginar: retrocedemos siempre al dar un gran paso como si estuviésemos obligados a no dar el segundo paso, el tercero, el siguiente y así, ser imparables. Por eso, es increíble que nunca ganemos por goleada, que no deseemos apabullar, que nos quedemos pensando en la tranquilidad que hay un último minuto y no nos pasará nada malo… hasta que viene el empate y la derrota, en un minuto fatal.
Nos ocurre en todo, en especial, en la política. Sabemos que es una asquerosidad ahora más que antes, pero la analizamos como nadie lo hace, elucubramos conspiraciones, predecimos el futuro una hora antes que ocurra lo contrario a lo que predijimos (y los sabemos), nos cansamos repitiendo que hay que hacer algo y cómo es posible que nadie haga nada (y no nos miramos en el espejo de la realidad y la propia responsabilidad). Maravilloso país de contradictorias escenas.
Rezamos apasionadamente en las procesiones más grandes del mundo, pedimos milagros en silencio para luego beber unos pisquitos y unas chelitas, nunca gritamos ni nos exigimos, confiamos en los inconfiables, perdemos tiempo y esperanzas y… seguimos esperando que alguien haga algo.
Pues fíjenese bien, porque hay 26 “partidos en carrera”, 26 grupos que no los vemos jamás en la fila del hospital, en la cola del pan o en el dolor de la muerte. ¿Y ahora? ¿Esperamos el minuto final?