Sea quién sea el ganador final, que no se sabrá hasta antes de Navidad, cuando terminen los recuentos y los litigios, esto ya es evidente:
- Los Estados Unidos han caído en el mismo juego ideológico de la Internacional Socialista/Foro de Sao Paulo, les guste o no. Desde votos de personas fallecidas, famosas y anónimas, votos cambiados en el correo, gente que votó más de 1 vez, delegados que cambiaron votos de Trump a Biden, a violaciones a las reglas estatales, distritales y nacionales que normalmente habían sido respetadas por ambos partidos en una tradición electoral relativamente limpia.
- Los medios, otrora bastiones de la transmisión de información objetiva, se han convertido abiertamente en difusores y porristas consientes del globalismo y el progresismo, y otro tanto inconscientemente (porque si están conscientes han perdido su materia gris), del socialismo. Se han auto adjudicado el papel de jueces y jurados, ven la Ley como una herramienta política, se creen por encima de la Constitución que “interpretan” a su sabor y antojo, y ahora agrego, se auto proclaman autoridades electorales. El New York Times se retractó, pero ya había manifestado esto abiertamente.
- Ambos lados se subestimaron. Los Republicanos subestimaron a que grado llegarían los Demócratas en su trampa, no tomaron las medidas pertinentes, se confiaron en el sistema, y subestimaron la profundidad del contubernio entre los medios, Wall Street y los Demócratas. Los Demócratas en cambio, subestimaron al electorado y sobreestimaron a los medios.
En la Cámara de Representantes, dijeron que ganarían al menos 20 escaños. De 232 Demócratas y 197 Republicanos, a la fecha llevan 215 Demócratas y 199 Republicanos. Se han computado 414 de las 435 curules. De las 20 que faltan, los Republicanos van ganando en al menos 14. Puede que los resultados cambien con el recuento de votos. Pero esto demuestra que los Republicanos no sólo retuvieron sus 197 de reelección, sino que ganaron otros escaños.
En el Senado, los Demócratas anunciaron que tomarían al menos 5 curules. Los Republicanos tenían 51 escaños y los Demócratas 47. Para el siguiente Congreso los Republicanos tendrán 53 y los Demócratas 45, con 2 independientes que votan con los Demócratas.
Interesante que por ejemplo en Georgia, dónde ambas curules del Senado estaban en elección. Por Shane Hazel, candidato del Partido Libertario, ni el candidato Republicano ni el Demócrata obtuvieron los 50% de votos. Habrá otro recuento también entre los otros dos candidatos de ambos partidos. Los Republicanos van ganando en Carolina del Norte, Alaska. Habrán recuentos en Michigan y Arizona.
- Quién más gasta, no es siempre el ganador. El Senador Republicano Lindsey Graham ganó contra Jamie Harrison, a pesar de que George Soros le financió una campaña de $100 millones a Harrison.
- Los medios jugaron un papel trascendental. Además de claramente auto proclamarse juez y jurado, ahora se auto proclaman por encima de la Constitución y anulan al Colegio Electoral y al debido proceso, a conveniencia. Todos los medios grandes, con contadas excepciones, proclamaron Presidente Electo a Joe Biden cuando el recuento de votos no había terminado. Debieron proclamarlo potencial ganador, pero no Presidente Electo, de acuerdo a la Ley.
Luego del efecto esperado, líderes mundiales y personalidades felicitando a un presidente electo aun no certificado, en una elección con sendos cuestionamientos legales, e ignorando claramente el proceso electoral de los EEUU, los medios tuvieron que quitar de sus pronunciamientos escritos Presidente Electo y poner virtual ganador, o potencial ganador. Pero, el daño ya estaban hecho.
De igual forma, confirmaron lo que estudios internacionales han arrojado: El poder de influencia de los medios sobre los votantes es evidente. Algunos votantes han manifestado que no fueron a emitir su voto por Trump pensando que “ya había ganado Biden” porque las encuestas de los medios así lo decían.
- La gente no lee y no se informa. Mucho voto anti Trump se derivó de dos elementos: la campaña masiva de desinformación sobre el tema de inmigración (los medios no decían que las leyes y prácticas (incluyendo las jaulas) venían de la era Obama, que hubo más deportados en esos años que en la Administración Trump. El tema del racismo, BlackLivesMatter surgió bajo la Administración Obama, no bajo la Administración Trump. Antifa viene de años atrás, no es nuevo. Y cómo esto, mucho más. La polarización de la sociedad estadounidense es dantesca.
Si las personas se molestaran en corroborar, ver quién dice qué y porqué lo dice, no caerían cual borregos en esta gran manipulación.
- Y finalmente, es obvio que el famoso virus y su mentada pandemia no han sido más que una gran burda manipulación. Que casualidad que ahora que creen que ganó Biden, salen los Demócratas a la calle a celebrar sin distanciamiento social ni mascarillas, y obvio sin temor. Sale el Gobernador de New York, Andrew Como, a decir que no permitirá ninguna vacuna que salga bajo la Administración Trump en “su” Estado, y que sólo dejará que entren vacunas bajo la Administración Biden. Alguien por favor me diga si esto no es manipulación política.
Ahora ya no hay zonas rojas ni naranjas, los colores valieron canción. Mágicamente, desaparece el temor al virus. Y América Latina, seguirá ese ejemplo. Vamos en vía directa al socialismo. #pensarnoduele #pensarnocuesta