El Bicentenario parece juego de olvidos, tradición de excusas, canal de engaños. Fíjense bien cómo los dirigentes (no sé qué o a quiénes dirigen) repiten mil y un promesas, jamás una sola idea o propuesta, y al final de todo, las incumplen, las dejan de lado, se excusan con que las condiciones han cambiado o inventan cualquier tontería para contradecirse… y así, se les elige.
Los peruanos estamos acostumbrados a que nos engañen, parece como si quisiéramos ser engañados, repetidamente, cotidianamente. Y si los que mienten son los políticos, es cosa común el aceptarlo, es el aire que se respira, lleno de contaminación electoral porque “aquí, no pasa nada”.
Es inverosímil pero ocurre: de 24 agrupaciones inscritas y reconocidas ante el Jurado Nacional de Elecciones y la Oficina Nacional de Procesos Electorales, más de 20 se acreditaron en los últimos minutos del cierre del plazo y lo hicieron mal. ¿Es eso un ejemplo? ¿Así dicen estar preparados para gobernar?
Y adicionalmente, cinco de esos partidos de cartulina y algodón, ni siquiera completaron la información básica que se les exige, perdiendo toda opción de representar a sus “millones de militantes” (como dicen cuando alguna pantalla de TV les da cabida).
Un partido político en el Perú -si vemos a esa masa de veinte grupos de bandoleros irresponsables, excusando a los cuatro restantes- es como la pandilla del barrio, el grupo de la esquina, los chicos del parque o tal vez, organizaciones diseñadas para actuar criminalmente, Usted señale la mejor definición.
Estamos a merced de piratas de la Democracia, bufones de la legislación, manipuladores de la verdad y lamentablemente, sólo dos o tres valen la pena escucharles y -tal vez- votar por ellos; pero los demás, deberían desaparecer de una vez por todas de la escena nacional.
En tu Voto está la respuesta, no vuelvas a desperdiciarlo en inmorales, tránsfugas, vacados, peloteros, terroristas, ladrones, mentirosos, violentistas o cobardes, así sean mujeres, hombres o lo que dicen sentirse.
Olvidaba: Y no permitas que “esos” vuelvan a decirte que el Perú está primero, porque nunca fue así.