Según cifras de la Sunat, nuestras exportaciones totales entre enero y junio de 2023 alcanzaron un valor de US$ 30,890 millones, lo que evidenció una contracción del 1.5% con respecto al mismo periodo del año pasado. Este desempeño se explica por los resultados del rubro tradicional que, con una representatividad del 71.9% del total exportado, cayeron un 3.3%; mientras que las del rubro no tradicional, que representaron un 28.1%, aumentaron un 3.3%.
En lo que respecta a los envíos tradicionales, pese al aumento en un 7% de las exportaciones mineras —que representaron el 85% del total—, los desempeños negativos de los sectores petróleo y derivados, pesquero y agrícola mermaron el resultado general del rubro. En cuanto al sector petróleo y derivados, este alcanzó un valor exportado de US$ 2,290 millones, con una caída del 37.7%, debido, principalmente, a los menores envíos de gas natural licuado (-54.7%). El sector pesquero registró envíos por US$ 849 millones, un 28.5% menos; mientras que las agrícolas sumaron exportaciones por US$ 200 millones, con una caída del 56%.
En cuanto al rubro no tradicional, las exportaciones agropecuarias, que representaron un 43% del total, sumaron US$ 3,722 millones, lo que evidenció un aumento del 6% con respecto al primer semestre del año pasado. Destacaron los envíos de uvas frescas (US$ 667 millones; +15.8%), paltas (US$ 618 millones; +27.8%) y arándanos (US$ 185 millones; +26.5%). Por su parte, el sector pesquero registró envíos por US$ 1,111 millones, un 31.3% mayores a los del primer semestre de 2022, particularmente por nuestras exportaciones de calamares y potas congelados (US$ 436 millones; +150%), y de moluscos preparados y conservados (US$ 162 millones; +195%). Por el contrario, los resultados negativos del rubro se evidenciaron en los sectores químico, textil y siderometalúrgico, con caídas del 15.9%, 13% y 12.2%, respectivamente.
En cuanto a los principales destinos de nuestras exportaciones en la primera mitad del año, China se posicionó como el principal, con un valor de US$ 11,337 millones (+10.7%), que representaron el 37% de nuestros envíos al mundo, seguido por EE. UU., con US$ 4,148 millones (+4.8%) y un 13% de nuestras exportaciones totales. Así, entre ambos destinos concentraron el 50% de nuestras ventas al mundo. Por otro lado, entre los principales destinos donde se contrajeron nuestros envíos figuran Corea del Sur, Japón e India, con caídas del 23.7%, 20% y 26%, respectivamente.
EXPORTACIONES DEPARTAMENTALES
Al analizar las exportaciones por origen departamental, los envíos de Lima, que registraron un valor exportado de US$ 5,460 millones, cayeron un 35.5%; los de Ica, que sumaron US$ 3,457 millones, cayeron un 2.1%; los de Áncash, que alcanzaron un valor de US$ 2,772 millones, retrocedieron un 7.7%; y los de Puno, que registraron envíos por US$ 750 millones, retrocedieron un 26.9%.
En el caso de Lima su contracción ocurrió únicamente en el rubro tradicional (US$ 2,239 millones; -55.8%). A nivel de productos, la mayoría de estas contracciones fueron explicadas por el desempeño en los envíos de gas natural licuado (US$ 975 millones; -54.7%) y cobre (US$ 107 millones; -89.6%).
Cabe mencionar que, entre los departamentos cuyas exportaciones alcanzaron mayores dinamismos en el primer semestre del año tenemos a Moquegua, con un crecimiento del 75% (US$ 2,516 millones). Dicho resultado obedece, particularmente, al desempeño de sus exportaciones mineras, que representaron el 97.4% de sus envíos, con un crecimiento del 84.2%. Asimismo, tenemos a Apurímac, con un aumento del 71.2% (US$ 1,500 millones), como resultado de sus envíos del sector minero, que representaron el 99% del total de sus exportaciones y alcanzaron un dinamismo del 71.3%. Igualmente, Pasco, cuyas exportaciones crecieron un 142.5% (US$ 550 millones), resultado que se debió, en particular, a sus envíos del sector minero, que representaron el 92% del total de sus exportaciones, con un crecimiento del 212.6%.
Lamentablemente, el desempeño en la primera mitad del año para las exportaciones genera un pronóstico desalentador para el periodo restante. Según el último reporte de inflación del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), para 2023 se esperaba una contracción en exportaciones del 0.2%, pero los resultados observados a la fecha indicarían que la caída hacia el cierre del año sería mayor.
De cara a lo que resta de 2023 y pensando en 2024, además de mitigar los riesgos asociados al fenómeno de El Niño Global y la eventual presencia de El Niño Costero en nuestro país, acelerar medidas de impulso a la competitividad logística y penetración de mercados serán objetivos claves para revertir estos resultados.