El drama de las izquierdas del odio, aquellas que son la representación fallida del marxismo leninismo en los tiempos actuales, porque no tienen un discurso, agenda, liderazgos, dirigencias ni planteamientos mínimos, salvo hacer de los gritos agresivos en las redes sociales -insultos de por medio- y la violencia en las calles “su forma de ser”, nos revela que la evolución del comunismo y el socialismo, en realidad se llama desaparición, ni siquiera es una involución, porque lo que más les duele y apesta ahora, es ser llamados “revolucionarios”, es ser señalados por esa tontería de “la lucha de clases”. Por eso, se exasperan, hablan cualquier tontería e inventan cualquier tipo de estupidez para atacar, ofender, herir y si les es más fácil, matar.
No existe, no se ve ni se escucha a ningún candidato que sea el pretendido líder de la extrema izquierda o de los izquierdistas del odio, o sea los progres y caviares, porque “no son nada y no tienen a nadie”. Entonces han visto que si en las redes sociales ponen a un cualquiera, a un imbécil, a un ignorante que vocifera, alguien con apellido de esos que se repiten como si fuera herencia política el asumir que el nieto fracasado será igual que el ancestro, se ha vuelto parte de la pesadilla de las izquierdas del odio, entre las cuales muy pocos dicen ser de izquierda, no se ven marxistas, ni comunistas, ni nada que se parezca a los nombres que se ponían porque las ideas les faltan y eso la ciudadanía lo castiga alejándose de tal perversión política.
Esa difícil etapa del fin de las izquierdas del odio, que comienzan a destrozar lo poco de institucionalidad que queda, porque se están extinguiendo al no poder movilizar, al no impactar con una, una sola protesta que tenga un solo, un solo motivo, les explota como sus coches bomba. Es así que “para suplir una idea, una acción”, suman lo que sea como motivo de agitación extremista y mezclan temas de inseguridad con un viaje de la Presidente al exterior, como si el no viajar redujera la criminalidad, suman las extorsiones de sus pares ideológicos criminales a evitar el reemplazo de unidades vetustas que carecen de SOAT, revisión técnica y estado de operatividad óptimo porque la pelea va otro lado, entre los que van a perder rutas y los que quieren ingresar en reemplazo.
Es como si entre los candidatos presidenciales se comenzaran a matar, porque uno se va a quedar con el dinero que los demás quieren robar. Esa es la realidad, una vez más, pero peor, como siempre.