La resolución de la representante Ana Paulina Luna (R-FL) que censuró al representante Adam Schiff (D-CA) expuso las acciones totalitarias basadas en que el fin justifica los medios.
La reacción de los demócratas (y sus medios aliados) al reporte Durham y los escándalos por sobornos de Biden confirman la embestida totalitaria a los Estados Unidos y ofrece vistazos de cómo podemos salvar nuestra República democrática. El Partido Demócrata niega la realidad y persigue incansablemente una agenda colectivista que, si triunfa, hará inútil la Constitución y nos llevará hacia una tiranía.
La burocracia federal socavó a Trump y facilitó la presidencia de Biden
El reporte Mueller, a pesar de su vehemente intencionalidad, no encontró evidencia de que Donald Trump se hubiera coludido con Rusia. El reporte Durham, recientemente publicado, encontró que no había sustento para la investigación del FBI/DOJ sobre la colusión entre Trump y Rusia. Schiff abusó de su posición de confianza en el Comité de Inteligencia de la Cámara, incluso cuando la presidió (2019-2023). Él estableció públicamente en múltiples ocasiones que él “tenía evidencia de colusión”. Schiff dijo que “estaba a plena vista” y que era “más significativo que Watergate”.
El 3 de agosto de 2016, el director de la CIA John Brennan se reunió en la sala de crisis de la Casa Blanca con el presidente Barack Obama, el vicepresidente Joe Biden, el director del FBI James Comey y otros funcionarios administrativos de alto rango. Brennan les informó sobre el plan de Hillary Clinton de “satanizar a Donald Trump mediante la creación de un escándalo sobre una interferencia de las agencias de seguridad rusas”, según el reporte Durham.
El equipo de Obama usó la falsa narrativa sobre la colusión rusa de Clinton para voltear nuestra República democrática y mantener a Trump fuera de la presidencia. Después de que fallaron, sus aliados del Estado profundo trabajaron duro para socavar a Trump.
El FBI ha tenido la evidencia de los problemas de armas e impuestos de Hunter Biden desde el 2018, sobre los cuales recién se le acusó. El exfiscal federal Joe diGenova dijo que la demora de cinco años es “una cantidad de tiempo sin precedentes para un caso tan simple”.
En 2020, el FBI creó un documento informativo sobre un reporte hecho inicialmente en 2017 sobre Joe y Hunter Biden en Ucrania. Este documento alega que el par aceptó $10 millones en sobornos provenientes del dueño de Burisma Holdings para abogar por el despido del fiscal que investigaba a la compañía. En 2018 en el Consejo de Relaciones Exteriores, Biden se jactó de haber usado exitosamente $1.000 millones de los contribuyentes para hacer que despidan al fiscal.
El documento informativo del FBI menciona dos cintas de conversaciones entre Joe Biden y 13 cintas de conversaciones entre Hunter Biden y un “extranjero” sobre el esquema. El presidente del Comité de Vigilancia de la Cámara James Comer dijo que una “razón por la que el FBI no tenía las cintas es porque nunca intentaron obtenerlas”.
Los demócratas niegan lo innegable y promueven la subversión
El uso de los demócratas de la fabricada colusión rusa dañó severamente a nuestro país en varias formas. Sin embargo, ningún demócrata o medio aliado se disculpó o mostró lamento por el daño y todavía niegan su mentira, incluso después de que esta haya sido definitivamente revelada.
Cada demócrata presente para la resolución de la censura votó en su contra. Cuando el presidente de la Cámara Kevin McCarthy intentó leer la resolución a Schiff, los demócratas rodearon a McCarthy y gritaron “vergüenza” por alrededor de cinco minutos. Los demócratas vitorearon a Schiff, quien dijo a los republicanos: “Me honran con su enemistad; me halagan con esta falsedad”.
Esta unanimidad de los demócratas a pesar de la abrumante e innegable evidencia en contra de Schiff es una señal del estado actual del Partido Demócrata. La misma unanimidad demócrata se aplica a la instrumentalización del gobierno contra adversarios políticos para lo que la evidencia es abrumante. Los demócratas actúan como si la subversión fuera su derecho mientras califican de insurreccionistas, extremistas de MAGA o mentirosos a cualquiera que no se rinda ante sus pies.
Los demócratas se unen con los medios y el Estado profundo en contra de Estados Unidos
Los demócratas pueden actuar de esta manera porque los medios tradicionales y la burocracia federal son sus aliados en la subversión. Trump fue procesado el 8 de junio en el caso de los documentos clasificados. El reporte salió el mismo día que los supuestos $10 millones en sobornos de Biden. Para los siguientes cuatro días, ABC, CBS y la NBC le dedicaron 0 segundos a cubrir esta historia y 291 minutos al procesamiento de Trump.
Para ganar en 2024, el régimen de Biden cuenta con sus medios aliados para esconder la verdad, difundir mentiras y satanizar a sus enemigos. Sus aliados del Estado profundo también ponen un muro a las investigaciones del Congreso mientras los demócratas en el Congreso llevan su engaño a un nuevo nivel al satanizar a sus contrapartes republicanas.
La satanización de los adversarios políticos mantiene a sus seguidores enojados, agitados y temerosos. En este estado, ellos rechazan los hechos que llevaría a que algunos entiendan y rechacen lo que el régimen realmente está haciendo.
Podemos salvarnos de la embestida
Para recuperar nuestra libertad, debemos encontrar formas para llegar con hechos y razonamiento sólido a personas que vayan o puedan votar por los demócratas y gente que tradicionalmente no vota. La Cámara liderada por los republicanos está exponiendo la criminalidad del régimen de Biden, pero su estrategia todavía está aguantando. Los republicanos pueden abrirse paso a través de continuar con las investigaciones abiertas y expandiendo sus esfuerzos a otras partes de la burocracia, como el Departamento de Estado.
La burocracia federal socavará a un presidente republicano, como lo hizo con Trump. Esto si falla en hacer que reelijan a Biden y hay una exposición insuficiente de la criminalidad de la burocracia federal por parte de la Cámara. Las investigaciones profundas ahora pueden poner la base para reformas en la siguiente administración y hacer que la burocracia federal se alinee a su rol constitucional.