Una constatación más de la catadura del comunismo y sus cómplices: Para rebatir las razones técnicas y jurídicas que sustentan la ley -aprobada por insistencia- que limita la Cuestión de Confianza se usaron medio verdades, mentiras y falacias.
Escuchar las intervenciones de los congresistas comunistas y satélites da vergüenza ajena. Ni saben leer lo que otros les escriben. La “defensa de la Democracia” en boca de un comunista es tan igual como la autoproclamado espíritu vegetariano de una hiena. Así de simple.
Estamos advertidos de la oposición comunista a las “pelotudeces democraticas” (Bermejo dixit). La verdadera defensa de la Democracia ya no puede hacerse solo con la katana de un Samurai sino con las armas y estratagemas de un Ninja.
A la gente de honor se le combate de frente, uno contra uno; al comunismo no. De ellos podemos esperar la emboscada, la puñalada artera, el lanzamiento de tierra a los ojos o la patada a los genitales. Los primos hermanos de los que hoy ocupan un escaño en el “establo parlamentario” (sic) herían de muerte por la espalda, daban un tiro de gracia y hacían volar los cadáveres con dinamita. Entonces, no seamos ingenuos ni babosos. El Do y el Código del Bushido no es para enfrentarlos, sino el Ninjutsu.
Los días que se vienen son cruciales. El pueblo peruano, creyente y demócrata en su mayoría, debe seguir en la lucha contra el comunismo, apañado por los cómplices del terrorismo.
La aprobación de la limitación al abuso de la Cuestión de Confianza es un primer paso para defender el Estado de Derecho y evitar otro sainete anticonstitucional como el de Vizcarra-Del Solar acaecido el 30 de setiembre del 2019
A ello debe seguir la renovación del Tribunal Constitucional, la fumigación del Sistema de Justicia y Electoral y la aprobación de la ley que evite que cualquier mequetrefe sea ministro; así como una serie de dispositivos legales que impidan el accionar mafioso del comunismo.
El combate por la Democracia requiere una segunda Operación Chavín de Huántar para volver a liberar al Perú de la amenaza comunista.