El feminismo bueno exalta el papel de la mujer y su misión en el mundo. El Papa San Juan Pablo II hablaba del genio femenino. La historia nos ha entregado mujeres notables unas en el camino de la Santidad como Santa Teresa de Jesús, Santa Rosa de Lima y Santa Teresa de Calcuta por mencionar a solo tres y otras mujeres ilustres que han ocupado puestos emblemáticos en la historia de la humanidad.
La noble exaltación de la maternidad
¿Quién no agradece, en su historia personal, la intervención de mujeres que han sido soporte y ayuda fundamental? Millones en la humanidad, agradecen a la madre que los trajo al mundo y cuidó de ellos con un cariño inmenso; otros le tienen un agradecimiento infinito a las abuelas o hermanas, que han sido un apoyo fundamental; también se agradece la existencia de maestras y mujeres voluntarias en instituciones de ayuda social.
Mujeres que se entregaron a Dios y al servicio de los demás
El mundo entero le debe gratitud gratitud a miles de religiosas, misioneras y enfermeras que han dedicado su vida para la atención de los pobres y los enfermos.
El extraordinario y conmovedor papel de la Virgen María
Es extraordinario y admirable el papel de la Virgen María que ha ejercido siempre su maternidad para atender a sus hijos alcanzándoles lo necesario para estar al lado de Jesús y por lo tanto en el camino correcto que lleva al Cielo. Además es ejemplo de Amor. Ella es la que más sabe querer en toda la humanidad.
Los ataques a las mujeres virtuosas que cumplen con su papel de madres
Hoy como nunca se está atacando a la mujer. La atacan fundamentalmente los que la engañan y le dicen que la maternidad es una esclavitud y que deben salir de sus casas para asemejarse a los varones. La engañan diciéndole que el Estado debe asumir la educación de los hijos y con esos postulados van directamente contra la familia. Con todas estas ideas alejan a la mujer de Dios y del modelo de madre que tienen en la Virgen María.
Estas ideologías que son una apología del libertinaje son diabólicas. Merecen nuestro rechazo absoluto y nuestro apoyo incondicional a la mujer que es madre y que cuida de sus hijos con un amor que es muy difícil sustituirlo.
Pidámosle a la Virgen, que lo puede todo, para revertir estas situaciones de alejamiento de Dios y volver al camino que Cristo nos enseñó y que la Iglesia nos lo recuerda.
Para tener en cuenta:
“El feminismo bueno y moderado es el que insiste en lo específicamente femenino y defiende sus derechos y libertades, afirmando que las mujeres tienen derecho a intervenir en los diversos campos, sin por ello poner en peligro ni la maternidad, ni la familia, ni su promoción personal y profesional” (Pedro Trevijano).
“La lucha por los derechos de la mujer forma parte del proceso de transformación que busca la igualdad, la justicia social y la libertad. Exigen igualdad de oportunidades y salarios, pero al mismo tiempo cultivan su personalidad de mujeres” (Pedro Trevijano).