El regreso del expresidente Jair Bolsonaro a Brasil, este jueves 30 de marzo por la mañana, prevé una sola reunión programada en la sede del Partido Liberal (PL), en la región central de la capital federal. El expresidente regresa de los Estados Unidos, adonde se dirigió el 30 de diciembre del año pasado, antes de finalizar su exitoso y popular mandato, para ser reemplazado por una minima diferencia en los resultados electorales, por el convicto Lula Da Silva, representante de una izquierda violenta plagada de historias de corrupción.
En la sede del partido será recibido por su esposa, Michelle Bolsonaro, y por el presidente nacional del PL, Valdemar Costa Neto. Se espera que también esté Walter Braga Netto, su leal candidato a vicepresidente en la fótmula electoral del año pasado y actual secretario de Relaciones Institucionales del partido.
Según el PL, en principio el evento será cerrado y no habrá manifestación o declaraciones a la prensa del expresidente, solo saludos de parlamentarios del partido y otras autoridades, en un espacio reservado. Bolsonaro tiene previsto asumir la presidencia de honor del partido la próxima semana y hacer algunos anuncios que ya ponen en alerta al actual gobierno, que no deja de intentar dar golpes de judicialización de la política, para intentar dañar la imagen de Bolsonaro.
Como medida de seguridad -ya anticipando el encuentro de simpatizantes del expresidente en la capital-, la Secretaría de Seguridad Pública del DF cerrará la Esplanada dos Ministérios a partir de las 23:59 de hoy, porque se prevé una nutrida concurrencia y el ánimo de pedirle a Bolsonaro que lidere una nueva agenda para la derecha brasileña y latinoamericana.
“De momento estoy sin mandato especifico, pero no estoy jubilado. Me reuniré con mi partido [el PL], que tiene prácticamente el 20% de los escaños en la Cámara y el Senado y veremos cuál es nuestra estrategia, no para el partido, sino para el país, y cómo nos podemos presentar para servir más y mejor a Brasil”, dijo Bolsonaro.
En Estados Unidos, el expresidente participó en pocas reuniones públicas, como eventualmente lo hizo en un congreso de conservadores estadounidenses y algunos encuentros con simpatizantes que enarbolaban grandes carteles diciendo: “Vuelve la pesadilla de la izquierda: Jair Bolsonaro”. Por eso, el mismo grito de sus simpatizantes y partidarios será mañana el eco de millones de brasileños que lo respaldan al decir: “Volvió la pesadilla de la izquierda: aquí está, en Brasil, Jair Bolsonaro”
Con información de O’Antagonista, Financial Times y Minuto Digital Perú con Suzanne Dos Santos y Tiago Mendoza desde Sao Paulo.