Para las elecciones presidenciales del 2021, a poco más de un mes de su realización, el panorama se está aclarando mejor y la gente entiende, comprende y conoce cada vez más a los candidatos que pueden ser una opción democrática, y los candidatos que definitivamente no son ni opción ni democracia en camino.
Y es que no se trata solamente del candidato a la presidencia, sino de su plancha, ya que si hipotéticamente ocurriera algo y fuera reemplazado según el orden secuencial que determina la propia Constitución Política del Perú, debemos fijarnos bien quienes serían esas personas y entonces, más de una sorpresa y escándalo surge.
¿Quieren otro Vizcarra en camino, conspirando para destituir al presidente y armar una cadena de corrupción y continuidad de malos manejos? Si es así, elijan a las izquierdas y destrocen anticipadamente al país.
¿Quieren otro Sagasti que no hace nada y que se opone a que todos los peruanos sean vacunados, discriminando a unos y excluyendo a otros? Repetimos: Si es así, elijan a las izquierdas y destrocen anticipadamente al país.
¿Quieren impulsar al Perú como una Nación fuerte, líder, poderosa, ejemplar, donde nuestros hijos y nietos vivan con dignidad, progreso, paz y desarrollo? Entonces miren bien adónde van sus votos, porque no es solo para presidente y su plancha que van a votar, sino también para que desde el Congreso se encuentren mejores representantes que apoyen al gobierno en lo justo y digno, o sean firmes opositores a cualquier barbaridad. Miren bien, elijan mejor.
Inversión no es una palabra que las izquierdas conozcan, ellos hablan de subversión.
Trabajo no es una acción humana que las izquierdas promuevan, ellos practican el relajo y el abuso sindical.
Esfuerzo y ejemplo, no son virtudes que las izquierdas construyan, ellos fanatizan en el odio y la violencia para controlar al que se esfuerza y al que brinda ayuda.
Patriotismo y peruanidad, no son actos de lealtad con el país que las izquierdas enaltezcan, ellos quieren otra bandera, pero manchada con tu sangre.
Miren bien, ya no es momento de ver si han cambiado, porque las izquierdas no lo han hecho y nunca lo harán. No podemos darle nada a quienes quieren quitarnos todo, en especial nuestra Libertad.
La Democracia exige tu participación, tu voz constante, exigencia de cumplimiento a los gobernantes, actitud firme contra el delito y la corrupción, decisiones y acciones, no complicidades, cero manipulación y ni un centavo de nuestros impuestos para los medios de comunicación.
Da tu voto, no regales el país. El Perú merece tener Presidente y no un delincuente otra vez.