El Congreso de los Diputados debatió la toma en consideración de la Proposición de Ley Orgánica de regulación de la eutanasia presentada por el PSOE.
Lo que se percibe en esta ley es una escasa preocupación por los cuidados y una alarmante obsesión con facilitar la muerte al enfermo. Hay, directamente, algunas informaciones que sólo pueden ser interpretadas como un cínico engaño por parte del PSOE. Por ejemplo, dice que “la eutanasia conecta con un derecho fundamental de la persona constitucionalmente protegido como es la vida”. Es decir, que para el PSOE el derecho a la vida consiste en acabar con una vida: una macabra burla a la razón.
En el exterior del Congreso, activistas de Derecho a Vivir escenificaban a los amenazados por la nueva ley, junto a una pancarta con el texto #StopEutanasia.
“Una persona mayor, un bebé con una cardiopatía en el seno de su madre, un enfermo terminal de, por ejemplo, sida o cáncer, etc. serán las víctimas potenciales si la pretensión de legalización de la mal llamada ‘muerte digna’ a petición del Gobierno de Pedro Sánchez llega a buen puerto”, denunció la plataforma cívica.
Dentro del Congreso, en el debate destacó Lourdes Méndez Monasterio, diputada de Vox por Murcia, que podéis ver sobre estas líneas. Hizo un magnífico discurso en defensa de la vida, a favor de los cuidados paliativos y contra el totalitarismo que esconde la legalización de la eutanasia.
Empezó su turno señalando: “La eutanasia es una de las respuestas que ustedes quieren dar al invierno demográfico para equilibrar el déficit de natalidad”.
La diputada reprochó al PSOE “Éste es un debate sobre el valor de la vida, no sobre el derecho a la muerte. Y la vida tiene un valor en sí misma“
La diputada de Vox señaló que “Si se tomaran el esfuerzo de hablar con algún especialista de los cuidados paliativos, les dirá que cuando al enfermo se le alivia el dolor y se encuentra cuidado y acompañado, y sobre todo no se considera una carga, ninguno quiere morir“.
“esas mismas razones de falsa humanidad a las que ustedes apelan son las mismas a las que se recurría para aprobar una de las primeras leyes de eutanasia en el Tercer Reich. Son las mismas razones”
Unas palabras que fueron seguidas de un aplauso por parte de los diputados de Vox. Méndez continuaba: “Y si les parece exagerado pueden estudiar la historia y luego lo comentamos, porque esa historia ustedes no la pueden reescribir”.
La diputada de Vox apeló a “una ley de cuidados paliativos y también a una reforma laboral para que se regulen permisos para aquellos familiares que han de cuidar a un enfermo en situaciones de tanta gravedad”. Méndez recordó que “la eutanasia no es lo mismo que los cuidados paliativos”, pues “en uno de los casos se trata de eliminar el dolor y en otro caso se trata de eliminar al enfermo”.
“¿Ustedes creen que las personas con una determinada enfermedad son indignas? Eso es una verdadera monstruosidad”
Méndez continuó con estas palabras: “Aprovechando el individualismo imperante, implantarán el totalitarismo del Estado que decidirá quién tiene derecho a vivir y quién tiene derecho a morir. Sí, es la conjunción perfecta para, en nombre de la libertad, atentar contra esa misma libertad. ¿O es que acaso ustedes ignoran que no será la libertad la que se ejerza cuando esta maquinaria se ponga en marcha? La petición de eutanasia será la última decisión desesperada que tomará una persona enferma, no autónoma, que no tenga un médico que le alivie el dolor o que se sientan un estorbo o una carga“.
La diputada de Vox recordó que “Las consecuencias que tiene aplicar una ley como ésta son: en primer lugar, se reduce la inversión en cuidados paliativos, como han denunciado los médicos en Canadá. En segundo lugar, se abrirá la puerta a todo tipo de eutanasia, con o sin consentimiento, como está pasando en Holanda: 6.000 muertes al año“
“Esta ley lo que persigue, al igual que la del derecho al aborto, es cambiar la mentalidad de la sociedad, es cambiar nuestra cultura de vida por una cultura de muerte”