En una entrevista realizada en mayo pero dada a conocer este mes de agosto, el Papa Francisco compartió su anhelo de visitar China y, en particular, de rezar en el Santuario de Nuestra Señora de Sheshan, cerca de Shanghai. Este deseo refleja el profundo respeto y la admiración que siente por los católicos chinos, quienes, según sus palabras, han mantenido una fe firme a pesar de las adversidades que han enfrentado a lo largo de los años. Las relaciones entre el Vaticano y China han sido históricamente complicadas, marcadas por la desconfianza del gobierno chino hacia la influencia del catolicismo.
Sin embargo, un avance significativo se produjo en 2018, cuando ambas partes firmaron un acuerdo que regula la selección de obispos en China, permitiendo que sean aprobados tanto por la comunidad católica local como por el Papa. Aunque este acuerdo ha sido renovado en dos ocasiones, en 2020 y 2022, su implementación no ha estado exenta de tensiones, con incidentes en los que las autoridades chinas han tomado decisiones unilaterales en la designación de obispos, desafiando el espíritu del acuerdo. Durante la entrevista, difundida en el canal de YouTube de la Provincia china de los jesuitas, el Papa Francisco destacó la paciencia y la capacidad de espera de los chinos, describiéndolos como «maestros» en estas virtudes.
Al referirse a los desafíos que enfrentan los católicos en China, el Papa envió un mensaje de esperanza, reconociendo que la fe y la resiliencia del pueblo chino son un testimonio poderoso de su dedicación y confianza en Dios. Lo demandante de ser Papa y la gestión de las críticas El Papa Francisco también reflexionó sobre las exigencias de su rol como líder de la Iglesia Católica.
A sus 87 años, atribuye su capacidad para manejar una agenda tan intensa a una vida organizada y al apoyo de colaboradores de confianza. Sin embargo, admite que las críticas, aunque a veces difíciles, son esenciales para el crecimiento personal y para la Iglesia en general. Incluso cuando enfrenta oposición directa, el Papa insiste en la importancia de la paciencia y la reflexión, recordando que algunas resistencias pueden contener críticas constructivas que benefician a la Iglesia. Afrontando crisis y desafíos globales.
El Papa Francisco no esquiva los desafíos que ha enfrentado durante su papado, desde la pandemia hasta los conflictos bélicos actuales. Al hablar de estos retos, subraya la importancia del humor y la oración, citando su devoción diaria a la oración de San Tomás Moro, que pide el don del sentido del humor. Esta actitud le ha ayudado a mantener la serenidad y a buscar siempre soluciones a través del diálogo y la paciencia.
Un llamado a evitar el clericalismo y la mundanidad
Al mirar hacia el futuro de la Iglesia, el Papa advirtió sobre los peligros del clericalismo y la mundanidad espiritual, considerándolos como las mayores amenazas para la Iglesia, incluso peores que los escándalos del pasado. En este sentido, instó a su futuro sucesor a mantener una vida de oración constante, recordando que es en la oración donde el Señor se comunica y guía. La entrevista con el padre Pedro Chía, filmada en la biblioteca del Palacio Apostólico Vaticano, ofrece una visión íntima del Papa Francisco, un líder que, a pesar de los desafíos que enfrenta, mantiene una fe inquebrantable en la capacidad de la Iglesia para superar las dificultades.
Su mensaje a los católicos chinos y al mundo es claro: la esperanza, la paciencia, el humor y la oración son las claves para navegar por los tiempos difíciles y seguir adelante con fortaleza y confianza en Dios.
Con información vía Zenit. Org