Este domingo Argentina abre sus esperanzas o cierra su futuro, alienta la Libertad o se inclina a las nuevas formas de esclavitud del populismo, salta al vacío o decide luchar por cada persona, venciendo al miedo, esa amenaza del modelo decadente que puede seguir condenando a la Argentina al triste final de otros que no supieron enfrentar a las tiranías de las mayorías, que siguiendo el bono y la eterna beneficiencia, caen en la desgracia de sobrevivir estirando la mano, a cambio de respirar en el borde de la alcantarilla.
Argentina tiene todo lo que necesita para un futuro mejor y ese futuro mejor es posible lograrlo con las ideas de la Libertad que están representadas en el programa de gobierno que ha presentado Javier Milei en nombre de la agrupación La Libertad Avanza (LLA), explicando con palabras de académico, lenguaje de maestro rural y mirada de un joven “no político”, las causas, la situación prevaleciente, los efectos y cómo se debe terminar con el desastre de décadas y cómo se puede recuperar el camino de una nación.
“Somos la fórmula para terminar con los problemas que hoy aquejan a la Argentina. Es imposible cambiar la realidad haciendo las mismas cosas, porque una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre”.
Javier Milei propone ideas socialmente aplicables, en momentos en los que el Estado argentino carece de caja y está lleno de deudas, moras e intereses. Milei quiere atraer inversionistas valientes dispuestos a saber que van a obtener resultados, bajo una condición: “un gobierno que no es apto para corruptos”.
“Para nosotros la educación y la salud son sumamente importantes. Hemos diseñado algo revolucionario, la idea del Ministerio de Capital Humano. La cuestión de la alimentación y el cuidado de los niños es otro de los pilares de nuestras propuestas. También queremos proteger el rol del aprendizaje, que es fundamental para cualquier ser humano”.
Milei separa claramente lo comercial de lo político. Por eso, en lo liberal es un devoto del libre comercio y la evidencia lo demuestra. Los negocios le hacen mirar mercados grandes, para ser grande. Entonces, con un programa de reformas de primera, segunda y tercera generación, en ese momento podrán abrir la economía, porque habrá tenido como antecedente la secuencialidad que sienta la base de su proyección.
“Cuando nosotros hablamos de la reforma de la primera generación del Estado, hablamos de bajar el gasto público y los impuestos. Hablamos de un programa de remodernización del mercado laboral para ser competitivos”.
La economía va a ordenarse en el rumbo y Argentina va a tener rumbo.
“Te quiero pedir que cuando vayas a votar lo hagas sin miedo. Venimos a ofrecerte el modelo de la libertad. Quiero que tengas una luz de esperanza. Existe una Argentina mejor. Pero esa Argentina solo existe si es liberal”.