Alejandro tiene 52 años y una buena esposa, trabajan duro, intensamente. Sus dos hijos van a un colegio particular donde son alumnos destacados. Alex en 5to y Marcelo en 4to de secundaria.
Luego de 2 años en la empresa como Jefe de Ventas –después de venir de otra donde fue Supervisor- Alejandro es invitado a salir por “reestructuración organizacional” algo así como no tener argumentos para que te vayas (eres caro, y otros son más baratos).
Cincuenta y dos años, eres viejo en un país joven. Debes asumir la hipoteca de la casa y el automóvil, colegio, los gastos habituales, el nivel de vida promedio. Toda una pesadilla.
Alejandro siempre pagó sus impuestos, es un buen ciudadano, nunca ha sido enjuiciado ni aparece en centrales de riesgo crediticio con antecedentes negativos. “Tengo fuerzas, soy bueno en lo que hago, no me dejaré vencer” –así se hablaba Alejandro, motivándose.
Cerca del tiempo de matrícula del colegio, pidió media beca para sus hijos, porque ordenó su economía para cubrir por lo menos el 50% de los gastos del primer semestre del año académico, postulación a la universidad, fiesta de promoción y una parte del soñado viaje del colegio. Además, escribió al Director del Colegio, afirmando que ni bien consiga empleo, no sólo pediría ser nivelado al 100%, sino que trataría de devolver la media beca por los meses cubiertos.
En resumen: le dieron ¼ de beca a uno de sus hijos, sujeto a que no vaya de viaje de promoción, ni a la fiesta de fin de año y que sus notas no bajen de 14 (y siempre fueron mayores a 17) Un maltrato inaceptable para quien durante más de 10 años fue alumno ejemplar.
¿Qué programa social o de protección financiera existe para las clases medias en el Perú? Ninguno
¿Acaso alguna ONG ayuda, orienta, asesora y sugiere un reordenamiento de las finanzas personales y el buen uso de los pocos recursos con que cuenta el ex trabajador? ¿Qué desenlace ocurre en estos casos?
Discusiones por el dinero que ya no alcanza, por el trabajo que no se consigue de inmediato. Separación o divorcio, tensiones, depresión; jóvenes hijos viviendo también un drama que los alcanza y afecta.
¿Por qué el colegio no otorga la beca completa cuando se advierte una situación como la descrita, antes de estar con los pagos vencidos? ¿Por qué el gobierno no ha diseñado esquemas de amparo social para los que pagan toda la vida los impuestos con los que otros tienen de todo y cada vez más, a expensas del sacrificio de unos pocos? ¿Por qué las centrales de riesgo no crean un “silencio” informativo que permita darle tiempo, espacio y un nuevo orden de cosas al trabajador afectado por un despido laboral, en vez de sentir la amenaza del reporte público?
Muchas iniciativas podrían ponerse en marcha pero parece que para algunos Congresistas ese no es el mercado electoral que los podría poner en el mismo escaño.
Entonces amigos: busquemos mejores candidatos, gentes que defiendan a las clases medias para no estar siempre como la clase del medio, alimentando la eterna beneficencia y un Estado que se desborda sobre nosotros.