El país aún enfrenta grandes retos para consolidar una verdadera cultura de gestión del riesgo de desastres, dijo Víctor Orellana, CEO de VOA Perú, empresa especializada en la gestión de desastres. Según explicó, pese a contar con instrumentos como el Plan Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (Planagerd) 2022-2030 y la Política Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (PNGRD) al 2050, la brecha entre lo planificado y lo ejecutado sigue siendo significativa.
“Hoy el desafío ya no es tener leyes o planes, porque estos existen. El verdadero problema es que no se cumplen de manera efectiva en todos los niveles de gobierno, y eso nos hace vulnerables frente a emergencias que sabemos que llegarán. La gestión del riesgo de desastres en el Perú necesita pasar del papel a la acción”, enfatizó Orellana.
El experto recordó que el país está expuesto a fenómenos recurrentes como lluvias intensas, huaicos, terremotos, incendios y deslizamientos, y que la experiencia demuestra que las emergencias golpean con más fuerza a las poblaciones pobres y a las infraestructuras no planificadas. “No basta con reaccionar después de la tragedia. La prevención tiene que ser una inversión sostenida, porque cada sol destinado a reducir riesgos ahorra hasta siete en respuesta y reconstrucción”, precisó.
En ese sentido, Orellana advirtió que Chile suele ser tomado como ejemplo en materia de desastres, pero aclaró que no debería replicarse ese modelo sin contexto. “Chile logró avances, pero lo hizo de manera reactiva, después de enfrentar emergencias muy duras que obligaron a generar cambios. El Perú no puede esperar a que una catástrofe nos enseñe lo que ya sabemos: necesitamos anticiparnos y actuar antes”, subrayó.
El experto añadió que la gestión de riesgos debe entenderse como una política transversal que involucra a ministerios, gobiernos regionales, municipios, universidades y también al sector privado. “No podemos esperar a que un desastre ocurra para recién actuar. La prevención debe estar en la agenda diaria del Estado y de la sociedad”, añadió.
En ese marco, destacó el inicio de la Encuesta Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (Enagerd) 2025, a cargo del Cenepred y el Indeci, como una oportunidad para medir los avances y también las debilidades en la implementación de la política nacional. “Los resultados de esta encuesta serán importantes, pero lo fundamental es que sirvan para tomar decisiones concretas y no queden archivados como diagnósticos”, advirtió.
Finalmente, Orellana llamó a reforzar el trabajo articulado entre los tres niveles de gobierno y a destinar mayores recursos a la prevención. “Invertir en gestión de riesgos es ahorrar vidas y costos futuros. Es hora de que el Perú pase del discurso a la acción”, puntualizó.