Un sacerdote secuestrado por extremistas en Malí hace más de un año ha sido liberado.
El padre Hans-Joachim Lohre (conocido cariñosamente como padre Ha-Jo), sacerdote alemán afincado en Malí desde hace tres décadas, desapareció el 20 de noviembre de 2022 tras celebrar misa en un convento de Bamako, la capital del país.
Su congregación, los Misioneros de África (conocidos popularmente como los Padres Blancos) confirmaron su liberación el pasado domingo (26 de noviembre) en un comunicado.
El comunicado, publicado el miércoles 29 de noviembre decía: «Hoy podemos anunciar oficialmente que el padre Ha-Jo fue puesto en libertad el 26 de noviembre de 2023. Nos llena de alegría saber que por fin está libre después de tantos meses».
El comunicado expresaba su gratitud a quienes habían contribuido a la liberación del padre Lohre, incluidas las autoridades malienses y alemanas.
Y continúa: «El padre Ha-Jo fue directamente a su país natal, Alemania, para reunirse con su familia y recibir los cuidados necesarios. Tras todos estos meses de cautiverio, su salud debe haberse resentido. Esperamos que se recupere rápidamente y que el trauma sufrido no le deje demasiadas secuelas».
Cuatro meses antes de su secuestro, el padre Lohre, que también es socio de un proyecto de Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), advirtió de que la actividad militante islamista estaba aumentando en África: «Los yihadistas vienen en grupos, en motocicletas, y las comunidades locales tienen que hacer tratos con ellos. Les prohíben tocar las campanas de las iglesias y beber alcohol, y obligan a las mujeres a llevar velo».
Añadió que se negaba a abandonar el país a pesar de ser consciente de que era un «blanco fácil» y de que los extremistas «vigilaban» a su congregación.
Explicó: «La pregunta que se nos hace en el Evangelio, ‘¿quién decís que soy yo?’, es el sentido de nuestras vidas, y vemos que lo importante no es cuánto vivimos, ni lo poco o mucho que conseguimos, sino si lo que hacemos tiene sentido y puede hacer del mundo un lugar mejor».
La Presidenta Ejecutiva de AIN, Regina Lynch, deseó al Padre Lohre una «pronta recuperación» y dijo que esperaba «poder seguir trabajando con él, ya sea en Mali o en cualquier otro lugar, tan pronto como esté en condiciones de volver a su misión».
Y añadió: «A pesar de nuestra alegría en este momento, también debemos recordar que hay muchos otros hombres y mujeres que permanecen detenidos o son perseguidos por sus creencias en todo el mundo, pero particularmente en Mali, Níger, Nigeria y Burkina Faso, y nuestras oraciones y pensamientos están con ellos también en este momento.»
«El día del secuestro se esperaba que el misionero celebrara Misa en la comunidad de Kalaban Coura. Su coche estaba aparcado delante de su casa y los investigadores encontraron más tarde el collar con la cruz cortada del sacerdote junto a su vehículo», afirmó ‘Fides’. Aunque no se produjo una reivindicación, fuentes diplomáticas y de seguridad atribuyen el secuestro al llamado Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes, vinculado a Al Qaeda.
Con informacion vía Vatican News, Zenit.org y Verdad en Libertad.
Imagen de portada: Padre Hans-Joachim Lohre (Conocido Cariñosamente Como Padre Ha-Jo) Foto: Ayuda A La Iglesia Necesitada