ACI Prensa.- El Papa Francisco lamentó que la Europa soñada por los fundadores de la Unión Europea “se ha debilitado con los años” y “es necesario salvarla”.
En una entrevista publicada este viernes 9 de agosto en el diario italiano La Stampa, el Santo Padre hizo un llamado al diálogo en las instituciones europeas, recordó la necesidad de poner en valor la unidad de los pueblos europeos sin renunciar a su propia identidad y lamentó el auge del soberanismo y del populismo: “Estoy preocupado porque se escuchan discursos que se parecen a los de Hitler en 1934”, aseguró.
En la entrevista, señaló que “Europa no puede y no debe fragmentarse. Es una unidad histórica y cultural, además de geográfica”.
Se refirió así al sueño de los padres fundadores de la Unión Europea, fundamentalmente los políticos franceses Robert Schuman y Jean Monnet, el italiano Alcide De Gasperi y el alemán Konrad Adenauer, quienes impulsaron la Comunidad Europea del Carbón y el Acero como instrumento para superar las heridas causadas por la Segunda Guerra Mundial y que constituye el antecedente directo de la actual Unión Europea.
En este sentido, el Santo Padre aseguró que “el sueño de los padres fundadores ha tenido consistencia porque ha sido una consecuencia de esta unidad”.
El Pontífice explicó que el debilitamiento de la Unión Europea en los últimos años está relacionado con “algunos problemas administrativos, de desacuerdos internos”. No obstante, mostró su confianza en que, finalizado el proceso electoral que dio como resultado un nuevo Parlamento Europeo y unos nuevos órganos de gobierno, “se inicie un proceso de impulso que avance sin interrupciones”.
Entre los retos de Europa para el futuro, destacó el diálogo. Un diálogo que tenga como “mecanismo mental” el lema: “Primero Europa, luego cada uno de nosotros”.
Sin embargo, puntualizó que ese “cada uno de nosotros” “no es secundario, es importante, pero Europa cuenta más. En la Unión Europea se debe hablar, argumentar, conocer. En cambio, en ocasiones sólo se escuchan monólogos de compromiso. No: se necesita escucha”.
Para que ese diálogo sea real “es necesario partir de la propia identidad”, afirmó el Papa Francisco. “La propia identidad no se negocia, se integra”. “La identidad es una riqueza –cultural, nacional, histórica, artística– y cada país tiene la suya propia, pero va integrada con el diálogo”.
“Esto es decisivo: de la propia identidad es necesario abrirse al diálogo para recibir de la identidad de los demás algunas cosas más grandes. No hay que olvidar nunca que el todo es superior a la parte”. “Cada pueblo conserva su propia identidad en la unidad con los demás”
En cuanto a los peligros que debe afrontar Europa, se refirió al soberanismo y al populismo. “El soberanismo es una actitud de aislamiento. Estoy preocupado porque se escuchan discursos que se parecen a los de Hitler en 1934”.
“El soberanismo es cerrarse. Un país debe ser soberano, pero no debe estar cerrado”. “El soberanismo es una exageración que siempre termina mal: lleva a la guerra”.
Sobre la identidad cristiana de Europa, el Papa destacó que “Europa tiene raíces humanistas y cristianas, es la historia quien lo dice. Y cuando digo esto, no separo a católicos, ortodoxos y protestantes”.
El Papa Francisco habló también en la entrevista de la inmigración, uno de los principales retos a los que deben hacer frente los países europeos. El Santo Padre indicó que a la hora de actuar es importante no perder de vista el derecho a la vida.
“Los inmigrantes llegan, principalmente, para escapar de la guerra o del hambre, de Oriente Medio o de África. Sobre la guerra, debemos comprometernos y luchar por la paz. El hambre afecta principalmente a África”.
Una vez han llegado a las costas europeas, el Papa recordó que recibir “también es una misión cristiana, evangélica. Las puertas deben estar abiertas, no cerradas”. Una vez se ha recibido, llamó a acompañar, promover e integrar a los migrantes.
Además, pidió a los gobiernos que actúen con prudencia, y subrayó que “quien administra está llamado a razonar cuántos migrantes se pueden acoger”.
El Papa Francisco. Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa