“El Papa ha descansado bien durante la noche, se ha despertado poco después de las 8”: esta es la corta comunicación de la Sala Stampa sobre la noche del Pontífice, que Vatican News complementa diciendo que Francisco tuvo ventilación mecánica no invasiva por la noche y que en la mañana ya pasó a “oxigenación de alto flujo mediante sondas nasales”.
Dice Vatican News que el Papa combina la terapia respiratoria con fisioterapia; agrega que su cuadro clínico es “estable”, incluso “en lo que respecta al corazón, los riñones y los valores sanguíneos”.
Sin embargo, reafirma el informativo vaticano que la situación general es “compleja, con broncoespasmos no inesperados en el contexto de una neumonía como la del Pontífice”. Como no se informó de broncoespasmos nuevos el día de ayer, se puede afirmar que esta alusión es debida a los broncoespasmos sufridos por Francisco antes de ayer, que obligaron a que el Pontífice fuera broncoaspirado para retirarle la secreción de moco interna. No obstante, y aunque el Vaticano diga que los broncoespasmos no son ‘inesperados’, médicos han afirmado que el hecho de que el Pontífice no esté eliminando por sí mismo ese moco, es preocupante.
Tras una hospitalización que ya se prolonga por 20 días, y de la que algunos médicos se aventuran a afirmar que como mínimo duraría 10 días más, muchos medios están destacando que el Pontífice no participará en las ceremonias del miércoles de ceniza de hoy en Roma, celebraciones de las más importantes de la Iglesia.
También últimamente han aumentado los medios que tratan de la posibilidad de renuncia del Pontífice, ciertamente ambientado por la duración de la hospitalización que ya va a completar tres semanas.
Recuerda Religión En Libertad que en caso de sede vacante, sea por la renuncia o fallecimiento del Pontífice, el Cardenal Camarlengo, junto con el Colegio Cardenalicio, administra los asuntos temporales de la Iglesia y organiza el Cónclave. Este gobierno durante la sede vacante es hecho en unión particular con el Cardenal Decano, el “primus inter pares” (primero entre iguales de los Cardenales), quien, según la constitución Universi Dominici Gregis preside la Misa “pro eligendo Romano Pontífice” que precede el inicio del Cónclave, preside también las Congregaciones Generales de Cardenales que preparan la elección del nuevo Pontífice, y convoca a los Cardenales electores a la elección.
