Desde un estrado, rodeado por decenas de mercenarios -muchos de ellos-, según se comenta cada vez más en las redes sociales, la millonaria campaña del candidato de los extremistas apoyados por el MOVADEF (brazo legal del partido comunista Sendero luminoso), hace de las arengas de su vocero contra los periodistas, una orden de ataque inmediato contra los corresponsales y enviados de los medios de comunicación que cubren el desplazamiento del chavista polpotiano.
Se dijo, se repitió y no nos creyeron hasta que desde hace unos días, los extremistas hacen del golpe “a los periodistas que no están al servicio del pueblo”, la expresión real de su comportamiento lleno de odio y violencia. Se dijo y se repitió y no nos creyeron, ahora lo viven en carne propia.
Pero eso no es nada aún, es únicamente el inicio de su escalada contra todo lo que necesitan amedrentar, silenciar, manipular. Y por supuesto, lamentablemente hay sectores de los medios que se tapan los ojos y dicen que “son gentes infiltradas, agresiones que hay que investigar”.
¿Quiénes tapan estas agresiones? Medios aliados de la izquierda que ha mostrado sus uñas, aún no sus garras.
Crear miedo hacia fuera, hacia la gente, para empoderar cobardemente, para envalentonar a sus huestes, para hacer del resentimiento una letanía de poder popular agresiva, esa es la intención de Castillo, Cerrón y todos los miserables que han soltado sus calzones y mostrado su intimidad.
Esto no es un experimento: están diciendo apenas lo pequeño, aún no la letra grande.
No será como Venezuela, es peor. Son tipo Camboya y la gente que no lee y no sabe de Pol Pot, se ríe y minimiza en su ignorancia. Son como sendero luminoso, sólo que van soltando sus piedras lentamente, mientras se horrorizan algunos pocos y los otros muchos no entienden, dudan o responden con sus antis sembrados durante decenas de años (anti aprismo, anti fujimorismo, anti minería, anti empresa…)
La consecuencia de estos odios viene de varias fuentes, una de ellas es la misma prensa que está siendo atacada físicamente. Pero hagamos una aclaración. La violencia, cobarde violencia, no se ensaña indiscriminadamente, sino contra objetivos ya establecidos, contra trabajadores de “medios que deben ser los atacados”, no es contra todos, ya que los aliados de Castillo y Cerrón son separados de la agenda del golpe y la patada.
Si seguimos así, sabiendo lo que está pasando y permitiendo que la gente minimice esto, el aire que respiramos se habrá acabado en unas semanas y comenzará en poco tiempo el éxodo de los que no dieron la pelea ahora, o la necesaria conjunción de fuerzas y medios para enfrentar la batalla que viene por nuestras libertades.
Fotografía, Diario Expreso, persecución a periodista en Ayacucho, por militantes comunistas de Perú “libre”