El gobierno ha generado pánico en las familias y se piensa que el encierro será prolongado ante la falta de medidas efectivas, ante la ausencia de medicinas, oxígeno, vacunas y recursos hospitalarios de primera atención.
Más de un millón de empleados públicos cobran puntualmente su salario. Que bueno por ellos y sus familias. Pero, siete millones de trabajadores independientes vivimos generando nuestros salarios y subvencionamos los salarios públicos. Quieren seguir cobrando?
En Lima, más de un millón de personas no tienen ingresos para dar alimentación completa a sus familias (desayuno, almuerzo, cena). Incluso, están dejando de alimentarse 1-2 días por semana. El gobierno no quiere que ellos accedan a formas de trabajo formal o informal.
María, Ernesto, Tomás, Maikol, Desiderio, lavan autos en un centro comercial. Son padres de familia recuperándose de meses sin ingresos mínimos. Ahora el gobierno dice que no vayan autos a su centro de trabajo. Ahora, no habrá pan en las mesas de ellos y sus familias.
Sólo en el depósito de Monterrico, más de 200 heladeros guardan sus carretas de salida diaria, herramienta de trabajo que les permite vender sus productos. Ahora, no podrán salir a vender. Para el gobierno, no es “escencial” que el más humilde lleve un pan a su hogar.
Un ejemplar ciudadano, de más de 80 años, sobrevive caminando incansablemente por las calles, para vender sándwiches y jugos que su esposa prepara muy temprano. Muchos vecinos y trabajadores en La Autora, Miraflores, le compramos. Ahora, verá restringido su trabajo.
Un gobierno insensible, sin objetivos, sin transparencia, dedicado a proteger la corrupción?
#EncierroNo #NoAlToqueDeQuiebra #NoALaCuarentena