Las cosas se ponen en mejor escenario: vamos a dar la pelea con más intensidad para que jamás vuelvan los días negros y dolientes al Perú. Y para ello, tenemos claro que el frente de batalla tiene varios núcleos de ataque, en lo que son las hordas de las izquierdas del odio (progres, caviares, extremistas, morados y de colores diversos, la cueva subversiva, los medios activistas, las ONG militantes y los restos de la “academia” que se posesionado de algunas facultades en universidades privadas, excluyentes de los pobres, rechazantes de los que no se someten al lenguaje agresivo y de imposición marxista, enmascarado en nuevas caretas políticas que se usan en elecciones y luego se reciclan en la misma porquería partidaria. ¿No es así?
Los que nos resistimos a darle la razón a los que quieren destruir al país, los que nos resistimos nuevamente a ser influenciados por las progres y los caviares, estamos hechos para resistir y para vencerlos, para enterrar a eso que se llama “izquierda” y no es más que destrucción de valores, menosprecio de virtudes, olvido de principios.
El Perú se prepara para una batalla monumental donde se decide como nunca antes si seguiremos en la misma senda de retrocesos y permisibilidad o vamos a decidir y actuar con claridad, terminando con el marxismo y con lo que sea comunismo, se llame como se llame, se vista como lo haga, se enmascare como prefiera para siempre confundir, para siempre engañar y para siempre condenar a vacíos de progreso y desarrollo.
Estamos a poco tiempo de saber quiénes y porqué quieren ser presidentes del Perú. No nos dejemos embaucar por “artistas y tránsfugas” o por los mismos de siempre. Veamos partidos y no organizaciones criminales que han nacido para estas elecciones y van a morir luego de los resultados, obtengan los votos que sea, porque nos van a estafar (a los que voten por ellos y al país en su conjunto) y serán como lo fueron con Toledo, Humala, Kuczynski, Vizcarra, Merino, Sagasti, Castillo y la Boluarte, todos, sin excepción, fruto de la perversidad política.
Tengamos prudencia y cuidado: Los de las izquierdas del odio se creen los que deben ser los elegidos, cuando su única ventaja es la agresividad, la estupidez, la ignorancia, la corrupción y la impunidad.
Seamos un muro de Patriotas, pero unidos sobre quienes avancen más, para no volver jamás a permitir que las izquierdas del odio maltraten a la débil democracia que debemos revitalizar, resucitar y engandecer.
