El turismo es un sector importante para la economía, no solo porque genera puestos de trabajo y crecimiento económico, sino porque promueve la preservación cultural, la protección ambiental y permite un desarrollo descentralizado en beneficio de las familias vinculadas directa e indirectamente con esta actividad económica. Este fue uno de los sectores más afectados por la pandemia, debido a las constantes restricciones dictadas por el Gobierno para salvaguardar la salud pública. Al ser bastante dependiente de la afluencia de viajeros, locales y extranjeros, continúa sin recuperar los niveles registrados previos a la pandemia. Así, en un contexto pospandemia, ¿cómo va la reactivación del sector?
Luego de la caída del 50.4% de su PBI mundial en 2020, el turismo inició su recuperación en 2021, lo que se refleja en la subida del 21.7% de su PBI mundial en 2021, según el World Travel & Tourism Council. En esta línea, en nuestro país, el sector alojamiento y restaurantes, directamente relacionado con el turismo, alcanzó un PBI de S/ 12,476 millones en 2021, un 43.3% más que en 2020. Si bien esta cifra podría parecer una recuperación del sector, ello se debería, en gran parte, a una baja base comparativa, pues al comparar el resultado con lo registrado en 2019, observamos que este es un 29% menor, pues en dicho año el valor agregado de dicha actividad económica alcanzó los S/ 17,569 millones.
En lo que respecta al empleo, en 2021, la industria turística empleó a 2.9 millones de personas[1], según datos de la Enaho. De igual manera, si bien esto representa un crecimiento del 23% respecto de 2020; este resultado es un 8.8% menos que el nivel de empleo vinculado al turismo en 2019.
AFLUENCIA DE TURISTAS INTERNACIONALES Y DIVISAS POR TURISMO RECEPTIVO
El turismo receptivo juega un papel importante en la generación de divisas para el país. Según el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), estas comprenden el gasto de los visitantes internacionales en bienes y servicios adquiridos durante su estadía en el territorio nacional y los ingresos por el transporte internacional de pasajeros. Por un lado, en el primer semestre de 2022, el flujo de turistas internacionales aumentó un 680.4% con respecto al año previo, al registrarse la llegada de 723,147 turistas extranjeros, según datos del Mincetur. Sin embargo, si bien este crecimiento parece indicar una recuperación importante, lo cierto es que ello se debe a una baja base comparativa, ya que en similar periodo de 2021 solo se recibió a 92,668 turistas internacionales.
Al analizar el flujo de llegada de turistas internacionales en el primer semestre de los años previos a la pandemia, observamos que, entre 2010 y 2019, esta venía en constante crecimiento. Así, lo registrado en el primer semestre de este año es un 66.8% menos que lo propio para el primer semestre de 2019, periodo en que llegaron 2.2 millones de turistas. El resultado de 2022 significa un retroceso a niveles similares a 2005, año en el que llegaron 727,847 turistas entre enero y junio.
En lo que respecta al ingreso de divisas por turismo receptivo, en el primer semestre de 2022, este aumentó un 304.4% con respecto a similar periodo del año previo, al registrarse el ingreso de US$ 1,189 millones, según datos del BCRP. Tal como en las variables anteriormente analizadas, si bien este crecimiento parece indicar una recuperación importante, lo cierto es que ello se debe a una baja base comparativa, ya que en el mismo periodo de 2021 solo ingresaron US$ 294 millones por este concepto.
Siguiendo el ejercicio, observamos que el ingreso de divisas por turismo receptivo en el primer semestre de los años previos a la pandemia venía en constante crecimiento. Así, lo registrado en el primer semestre de este año es un 48.5% menos que lo propio para el primer semestre de 2019, periodo en que ingresaron US$ 2,307 millones por este concepto a nuestro país. El resultado de 2022 significa un retroceso a niveles similares a los de 2010, año en que el ingreso de divisas por turismo receptivo ascendió a US$ 1,151 millones.
La actividad turística influye en distintos sectores económicos de manera directa e indirecta, contribuye a la dinamización de la economía, la obtención de recursos fiscales y la generación de empleo formal. En un contexto pospandemia, es fundamental que las autoridades de los diferentes niveles de Gobierno acompañen su recuperación, priorizando acciones concretas que permitan un mejor desempeño del sector.
Es importante continuar posicionado el país como un importante destino turístico ante los ojos de los viajeros internacionales. Contar con una vasta riqueza natural y cultural no es suficiente, sino que esta también se debe aprovechar para hacer del Perú un atractivo destino. Ello será posible mediante la mejora de la conectividad vial y de la infraestructura de los aeropuertos regionales, así como al garantizar el acceso a servicios básicos y seguridad ciudadana, y el uso eficiente de los recursos públicos en la promoción del turismo. Pero, además, se debe poner énfasis en la mejora de la competitividad de los atractivos turísticos con los que cuentan todos los departamentos del país.
[1] A partir de la Cuenta Satélite de Turismo de 2015, elaborada por el Mincetur, se obtuvo las actividades económicas relacionadas con el turismo y, junto con la información de la Enaho 2021, se encontró la cantidad de empleados en dichas actividades.