El Perú es todo lo hermoso, grande, encomiable y trascedente que podamos imaginar. Lo sabemos , lo leemos, lo aprendemos, nos lo enseñan de padres a hijos, de abuelos a nietos. Y sin embargo…
Y sin embargo, destruimos el ahorro individual para las pensiones de jubilación, así como se desfalcó el historial de aportes previsionales en la ONP. Vean ustedes: No es que te han dado la oportunidad de sacar parte o todo tu dinero ahorrado en una AFP, no es así la realidad.
Lo que han hecho sucesivos gobiernos, es dejarte sin pensiones, sin jubilación. Y a cambio, tú has financiado al gobierno en el crecimiento de la planilla burocrática y los excesivos sueldos de ministros, vice ministros, asesores, consultores y cuanto ineficiente ocupa un puesto en el Estado. Lo has hecho no sólo con el pago de muchísimos impuestos abusivos, sino con el uso de tus ahorros previsionales.
¿Tus hijos estudian en una escuela o universidad privada? ¿Tienes seguro social de salud EsSalud? ¿Pagas por un seguro privado o EPS? Entonces no usas los recursos humanos, ni los servicios, ni los recursos materiales, no usas la infraestructura del Estado (la que se hizo con el pago de tus impuestos) y permites que millones tengan acceso a ella, eso está muy bien, es tu acción de solidaridad. Nadie está reclamando cuando el fin es justo y bueno.
Pero cuando te quedas sin trabajo, cuando tus ahorros se van acabando ¿Te ayuda el Estado con algún programa social de alivio temporal para el pago de los colegios, de la universidad, de tu seguro familiar de salud?… Jamás, nunca. ¿Qué sucede en ese caso, cuando además, estamos en medio de una extraña pandemia en la que el Estado, el gobierno no asume de inmediato su rol de defensa y garantía de la salud, la educación, el trabajo y la seguridad de todos los peruanos? Sucede que te obligan a ver si en tus bolsillos queda algo, para que lo gastes y el Estado, el gobierno, no haga nada, como siempre.
Mientras usas tus ahorros personales y se acaban, pides retirar tus aportes previsionales para los pagos que se te acumulan: préstamo hipotecario, préstamo vehicular, cuotas de compras con tarjeta de crédito, el colegio de los hijos, la universidad, la maestría o el curso de especialización. Tus responsabilidades están asumidas y debes honrar tus pagos, pero en una pandemia, ¿No es responsabilidad del Estado proteger a la Clase Media para que siga siendo el soporte social más importante en el progreso y desarrollo del país? ¿No existe un Bono Clase Media que haga sostenible el colchón social que significa una estructura aspiracional para los más pobres?
Fíjense bien: De poco más de 7 millones de afiliados a las AFP, solamente el 42% es cotizante activo (trabajador dependiente o trabajador independiente). Se estima que a diciembre de 2020, unos 4 millones 512 mil afiliados no estaban cotizando porque ya retiraron todos sus ahorros, y/o no tienen trabajo que les permita estar al día en sus aportes. Podríamos afirmar también, que únicamente un pequeño porcentaje de ese total, podría reengancharse en su historia previsional de aportes, si pudiera hacerlo, si tuvieran ingresos, si encontrasen trabajo, si alguien les pudiera explicar los beneficios que están perdiendo.
¿Por qué el Estado, por qué el gobierno no ofrece un aporte mínimo mensual en favor de esos 4’512,000 de trabajadores afiliados hasta su reenganche laboral, por tramos renovables cada seis meses por ejemplo? ¿Eso que permitiría? Que todos ellos tengan activada su historia previsional y la Cobertura de Sobrevivencia: acceso a pensiones de viudez, orfandad, estudios universitarios, ascendencia (papá y mamá), invalidez parcial, invalidez total, invalidez temporal, invalidez permanente.
¿Por qué permitimos que un país prodigioso se siga destruyendo?
Veamos el caso de la ONP (Oficina de Normalización Previsional): De 4 millones 716,000 trabajadores afiliados, solamente están cotizando 1 millón 187,000. Es decir 3 millones 228,655 peruanos han cortado su historia de aportes previsionales, están lejos de lograr -algún día- la acumulación mínima de 20 años de pagos efectivos y además, han perdido la cobertura de sobrevivencia. Los cotizantes activos apenas superan el 31.5% y saben que no están acumulando un ahorro, eso es peor todavía.
Epilogo: Cerca de 8 millones de trabajadores afiliados a las AFP y a la ONP han dejado de aportar, han interrumpido su historia previsional, no tiene cobertura de sobrevivencia ni ellos, ni sus dependientes (potenciales beneficiarios)… y otros millones más son informales…
¿Qué proponen como solución el gobierno del Partido Morado, un grupo de lobistas y el Congreso que dirige la izquierda? La nacionalización del sistema de pensiones: “Pobreza para todos”