Las intensas reuniones durante el “Spring Meeting” del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BMG), programadas entre el 15 y el 20 de Abril 2024 provocan que literalmente, delegaciones de todo el mundo tomen por asalto numerosas oficinas de los tres primeros pisos de los dos inmuebles que corresponden al “Headquarter (HQ)” del FMI y un inmueble que es el HQ del Banco Mundial, todos ellos, en el North West de Washington DC.
Al peso de esta esquina, se le ha sumado uno de los anuncios que más preocupación ha causado hasta el momento en la comunidad financiera. Es el comentario del Fondo Monetario Internacional (FMI) al indicar que el crecimiento global se ha debilitado y la productividad se ha desacelerado a pesar de los rápidos avances en la inteligencia artificial y otras tecnologías digitales, teniendo este correlato que analizar el hecho gravitante que estamos en medio de dos escaladas bélicas (Ucrania y Gaza).
El centro de la atención está en la preocupación de los gobiernos del G-20, que representan 85% del GDP global, los cuales deben promover el crecimiento de largo plazo enfrentando numerosos riesgos junto a las obvias restricciones fiscales. Las decisiones que adopten estos gobiernos, y sus bancos centrales, afectaran el mundo porque relocalizaran poder y puestos de trabajo. De allí la importancia de las intervenciones de sus delegados y de otros funcionarios, quienes vienen a exponer sus acciones y planes.
“Hay que escuchar con detenimiento, interpretar y traducir lo que se dice, para tener herramientas en las decisiones de gobierno, de cada país, y en en el impacto global que de ellas se pueda derivar” me dice un Ministro de Finanzas europeo, mientras se forman grupos de debate y análisis referidos al la acción fiscal, las pensiones, el ámbito y alcance de una mayor tributación y el gran dolor de cabeza del mundo que mira desde los retos del trabajo y el desarrollo: la informalidad creciente y las guerras.
Un claro ejemplo de estos “impactos influyentes” es Brasil, que mediante su ministro de Finanzas dio a conocer las reformas implementadas (en materia fiscal, expansión de impuestos y seguridad social con especial enfoque en las pensiones), incluso durante la pandemia, medidas que permiten enfrentar hoy la coyuntura en mejores condiciones (por menor burocracia y mayor espacio fiscal).
Para el Hemisferio Occidental, en particular nuestra región, el Fondo Monetario Internacional (FMI) eleva la perspectiva de crecimiento a 2%, sin embargo un grupo significativo de países estará por debajo de ese estándar.
Para el Perú, se espera superar el 2.5% en el 2024 que condice con el desastroso resultado de -0.6% del 2023. Este crecimiento potencial sólo será posible, gracias al esfuerzo producto de la inversión y producción de la industria minera formal y la mejora de los precios de bienes transables.
Mensaje de la fecha: Es prioritario para nuestra región, realizar los mayores esfuerzos para aumentar la inversión privada rápidamente, con las máximas garantías de respeto al proceso que ello significa en su integridad y avances, y es importante también, lograr que la inversión pública sea eficiente y se efectúe con transparencia y sin corrupción.
Los ciudadanos, la sociedad civil, tienen que asumir un rol más activo en el impulso a políticas nacionales que permitan ampliar la base tributaria, asegurar un país de respeto a las inversiones y garantizar que los gobiernos respondan con mejores y mayores servicios a sus poblaciones, en especial, hacia los adultos mayores, las mujeres y los niños.
Desde Washington, D.C. en el Spring Meeting del FMI, Luiz Zolla, corrresponsal de Minuto Digital news